El Gobierno salvadoreño está dispuesto a conceder modificaciones al Presupuesto General de la Nación 2020, y a los contratos de crédito para el Plan Control Territorial preaprobados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), aseguró ayer el presidente de la República, Nayib Bukele.
El mandatario se reunió ayer con el presidente de la Asamblea Legislativa, Mario Ponce, para discutir los planes de gasto del próximo ejercicio fiscal, incluyendo los préstamos por $200 millones para la estrategia de seguridad impulsada por el Ejecutivo.
“Siempre y cuando no afecte a la población y no se afecte un ápice de los objetivos que queremos lograr para nuestro país, nosotros estamos dispuestos a modificar lo que sea”, manifestó Bukele.
El Presidente se refirió a la crítica de los partidos a los $28.2 millones para capacitación a jóvenes a cargo del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (Cifco), financiado por el BCIE, y expresó que están abiertos a que el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (Insaforp) proporcione las capacitaciones, firmando un convenio con esta institución.
Advirtió que cambiar los términos del contrato con el BCIE, sin embargo, “no es posible por los tiempos de ejecución del Plan”.
“Nosotros vía gobierno podemos hacer un convenio con el Insaforp, si el problema es la duda de que va a ser ideológico”, afirmó.
El Gobierno también se mostró abierto a que los diputados les digan qué otras comunidades pueden ser beneficiadas con los $15 millones destinados a 24 kilómetros de carretera en la Fase II.
Dentro del proyecto del presupuesto, el Gobierno está abierto a reorientar el incremento de $124 millones del rubro 55 de Gastos Financieros a las partidas correspondientes, uno de los gastos más cuestionados por los diputados. Miembros del Gabinete del Ejecutivo ya han reconocido que en esta partida se incluyó el pago de planillas, bienes y servicios para cumplir con la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF).