La misión de observación electoral de la Unión Europea (UE), que desplegó 82 observadores en 400 Juntas Receptoras de Votos (JRV) en el proceso electoral del presidente de la República, calificó el proceso de creíble, transparente, pacífico y con suficientes garantías.
La UE señaló como éxito la transmisión de resultados preliminares. “Los procedimientos de votación, conteo y transmisión de los resultados se aplicaron correctamente en un proceso transparente que ofreció suficientes garantías”, reza la declaración preliminar de la misión de observación electoral de la UE en El Salvador.
Sin embargo, el informe señala debilidades al Tribunal Supremo Electoral (TSE): falta de transparencia y retraso en sus decisiones, y algunas decisiones polémicas como el acta de escrutinio.
De acuerdo al informe, se limitó la transparencia cuando el TSE retrasó la toma de decisiones en el instructivo para el escrutinio final, que incluía procedimientos para resolver incoherencias entre actas de cierre y conteo de papeletas, y tomó decisiones polémicas sobre el diseño de las actas de escrutinio. En esta decisión, el informe de la misión cree que “prevaleció el interés de los partidos sobre el de los votantes en ejercer un voto informado”.
La composición del órgano colegiado del TSE influyó, según el informe, en el proceso electoral y la forma en que comunicó sus actividades: “La comunicación sobre las conclusiones de las pruebas del sistema para la transmisión de resultados preliminares fue pobre, lo que contribuyó a alimentar la desconfianza y las acusaciones de fraude”.
Además, menciona que el TSE no publicó todas sus decisiones en su sitio web y las audiencias se celebraron a puerta cerrada. Luego de observar este hecho, la misión de la UE advirtió en su informe que estas observaciones “pueden no estar totalmente en consonancia con los compromisos internacionales y regionales suscritos por El Salvador.
Sin embargo, la misión señala que se permitió de manera irrestricta la observación en el proceso electoral, así como la presencia de vigilantes durante la votación, aunque critica complejos procedimientos de acreditación en el TSE.
La UE menciona que “reiteradas acusaciones de fraude, carentes de fundamento, perturbaron el proceso electoral”, además de que critica a los partidos por la falta de contenido en la campaña, comentarios sexistas contra las candidatas a la vicepresidencia de la República y también señaló la ausencia del debate sobre el origen de los fondos que usaron los candidatos para campaña.