El presidente Nayib Bukele vetó el decreto el 15 de junio. El veto fue recibido el 25 de junio a las 3:36 de la tarde. Arena y FMLN pidieron superar el veto recibido ayer mismo.
Bukele argumentó que el decreto 661 es inconstitucional, ya que considera que viola el principio de separación de poderes y concepción de salud de los habitantes como bien público.
El mandatario indicó que el decreto vetado favorece la reanudación de las actividades económicas sobre criterios técnicos y médicos para salvaguardar la vida y la salud de la población.
“Desbordaría la capacidad del sistema de salud”, sostuvo, sobre el plan de reapertura económica normada en el decreto 661, que ordenaba la inmediata activación del servicio de transporte público y no contemplaba retenciones de personas que incumplieran cuarentena.
Diputados de Arena señalaron ayer que ganarán la nueva controversia en la Sala de lo Constitucional porque, sostuvieron, tienen la razón.
René Portillo Cuadra, de Arena, cree que la “verdadera razón por la cual vetó esta ley” es que el decreto 661 normababa la transparencia.