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Tras guardar silencio sobre la lista Engel, en la que la EEUU coloca a políticos y empresarios señalados por corrupción y en las que figuran el influyente dirigente del FMLN José Luis Merino y también efemelenista y expresidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, su secretaría general dice que el partido “no debe responder por acciones personales o individuales” de sus dirigentes, militantes o afiliados.
Todo aquel dirigente, militante o afiliado de nuestro partido involucrado en actos que riñan con la ley, la ética y el buen desempeño deberán responder de manera personal ante los señalamientos”. dijo el secretario general del FMLN, Óscar Ortiz, en una declaración pública.

Sin referirse a los señalados por el Gobierno de EEUU, Ortiz dice que el FMLN cuenta con un Tribunal de Ética “que debe retomar acciones de forma oportuna sobre los distintos casos que se presenten, de acuerdo a su nivel de gravedad”.

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En la misma declaración el máximo dirigente del partido de izquierda dijo rechazar “la grave situación de ilegalidad e impunidad en que ha caído el país”, y acusó al gobierno de Nayib Bukele y a su partido Nueva Ideas de propiciar, según él, “un estado autoritario” y “un periodo oscuro de persecución política”.

También acusó al ejecutivo de silenciar a instituciones anticorrupción como la Comisión Internacional Contra la Impunidad en El Salvador (CICIES) y de institucionalizar la corrupción.

Por su parte el Consejo Nacional del FMLN dijo que "condena todo tipo de corrupción" y que frente a las denuncias dijeron desconfiar en las instituciones de justicia que según ellos es utilizada por "el régimen de Bukele", y acusan al mandatario de guiar "una estrategia de persecución política a dirigentes y militantes de nuestro partido".