Para Zamora, es el momento más inoportuno que El Salvador pudo haber elegido para romper con Taiwán porque se vive una política exterior delicada con el gobierno de Donald Trump, a quien considera el principal responsable” porque China aprovecha el vacío diplomático generado por la hostilidad del presidente estadounidense en la región.
¿Perjudica o beneficia establecer relaciones con China y romperlas con Taiwán?
Las ventajas de seguir relaciones diplomáticas con la China Popular me parece a mí que son totalmente dudosas, por el momento. La experiencia que tenemos de toda esta política del gobierno de la China Popular para ir pues aislando a Taiwán diplomáticamente es que antes ofrecían muchísimas cosas a cambio de cerrar una relación con Taiwán y abrirla con ellos, pero que eso poco a poco ha ido terminando de tener interés para los mismos chinos, porque el número de países es muy pequeño comparado con los países que ya tienen relaciones con ellos. Quizás el mejor ejemplo de esto es lo que le pasó a Costa Rica, el ofrecimiento de la China Popular fue hacerles un estadio, una carretera y ponerles una refinería de petróleo en el territorio, además de comprarles parte de su deuda. Les hicieron el estadio, la carretera no se terminó y la refinería nunca se hizo. Últimamente ya no hay mayor interés en China Popular de poder abrir más diplomacias porque lo que queda son alrededor de 13 países más con relaciones con ellos y la mayor parte eran centroamericanos, Paraguay, islas del océano Pacífico muy pequeñas. En ese sentido, la capacidad de cooperación hacia El Salvador es mucho mayor la de Taiwán que la de China Popular, porque allá son pocos países con los que un país tenía relación. O sea, que yo no le veo mayor razón de ser a una ruptura por ese tipo de razones. Habría que ver cuáles son las verdaderas razones que el Gobierno de El Salvador ha tenido para abrir las relaciones diplomáticas, romperlas con Taiwán, y abrirlas con China Popular.
El Gobierno del FMLN decide establecer relaciones con China Popular casi al final de su segunda gestión. ¿Cómo interpreta esta decisión?
La oportunidad, verdad, ¿qué oportunidad ha tomado el Gobierno?, porque se trata de una relación que El Salvador ha mantenido con un país por más de 80 años en la cual todos los gobiernos de ARENA y los dos primeros gobiernos del FMLN habían mantenido la relación con Taiwán y se han beneficiado mucho porque la cooperación de Taiwán con El Salvador ha sido fuerte. El hecho de que no dan ninguna razón de peso para hacer este cambio a estas alturas es una falta de transparencia de parte del Gobierno.
¿Cuál es la verdadera razón? Lo que está diciendo ahora el ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán y es porque le pidieron que le financiara el Puerto (La Unión) y, por otra parte, le diera dinero al FMLN para la campaña electoral es una acusación muy grave, muy pero muy grave. No debemos de creerla solo porque lo dijo el ministro de relaciones exteriores, como tampoco creer lo que el gobierno de El Salvador a través de sus voceros está diciendo que eso no es así, porque es obvio que van a tener que decir que no, en caso de que lo hayan hecho. Lo que sí amerita, para el nombre de El Salvador, es un serio análisis y una investigación a fondo de qué hay detrás de esta ruptura de relaciones con Taiwán y apertura con el gobierno de China Popular, y eso obviamente le corresponde a la Asamblea Legislativa hacerla, porque es el único organismo que constitucionalmente tiene que hacer supervisión sobre las actividades que hagan los otros poderes del Estado, para eso están las famosas comisiones especiales. No estoy juzgando quién de los dos tiene razón, sí estoy diciendo que esto sí hay que investigarlo porque parece una cosa como muy oportunista, al final ya del gobierno y precisamente el ministro que enigmáticamente en los dos gobiernos del FMLN mantuvo la necesidad de relaciones con Taiwán, Hugo Martínez, ahora que ya no es ministro y se ponen a hacer todo lo contrario, eso es algo que el candidato del FMLN tiene que ver qué es lo que dice... Esto ha sido muy falto de transparencia. No quiero emitir juicios definitivos porque hay tendencia en todas partes del mundo que abren las relaciones con China Popular y la cerraron con Taiwán, eso es una realidad.
¿Cree que se aplica esa diplomacia del dólar de la que habla Taiwán (al señalar a China)?
El problema es que aquí hay una tradición muy larga en la cual los taiwaneses han coincidido, muchos gobiernos mantienen la relación a base de prebendas, recuerde el escándalo que tuvimos con el expresidente (Francisco) Flores de los dineros de Taiwán, que Taiwán hace tradicionalmente contribuciones al partido de gobierno también es algo conocido en el mundo diplomático. Lo que ahora dicen, que les pidieron demasiado los de acá, eso es lo que ahorita está en cuestión, pero yo la impresión que tengo es que, después de los escándalos, no solo aquí en El Salvador, por dineros que Taiwán daba para apoyar al partido de gobierno en Taiwán había repercutido negativamente, incluso hay un expresidente preso, y que montaron un aparato bastante fuerte y desarrollado para evitar ese tipo de cuestiones que no son dignas de ningún país, ni del que lo da ni del que lo recibe. O sea que, en ese sentido, me parece que ésta es un área digna de investigación de la Asamblea Legislativa porque hay cuestiones de soberanía del país y de transparencia.
¿Cuáles son los efectos que tiene para El Salvador el posible corte de ayuda de Estados Unidos, hay una campaña de congresistas?
Eso se suele dar. Pero porque cuatro o cinco congresistas estén amenazando con eso y hagan cartas y declaraciones públicas, no hay que creerse que el gobierno lo va a hacer, hay que verlo cómo se desarrolla. Lo que sí es cierto es que este es el momento menos oportuno para haber hecho una cosa de éstas, porque nuestra agenda diplomática con los Estados Unidos está en un momento muy crítico, con problemas feísimos, como la política de Trump con nuestros compatriotas en términos de la migración, todas las cosas que son un delito contra la humanidad de andar separando familias, es un momento muy delicado para poderle echar más leña al fuego. Por otra parte, en la administración del señor Trump, hay una actitud muy negativa hacia el Triángulo Norte y América Latina.
Al mismo tiempo el gobierno norteamericano está preocupado porque en América Latina el vacío que ellos han creado con esta su política, de andar agrediendo países, hablando mal de todo el mundo y exigiéndole a México que pague por un muro, cosas estrafalarias, ha creado un vacío en América Latina de relación política con Estados Unidos; la China Popular está aprovechándose de ese vacío, ahora está de ganancioso y está dando en Estados Unidos una preocupación, porque los chinos están metiéndose en lo que ellos consideran su patio trasero. En esas condiciones, venir y tomar esa medida con un gobierno que ya no le queda ni un año y en medio de proceso electoral, es el momento más inoportuno. Más parece una decisión ya sea por razones ideológicas o de otra naturaleza que (necesita) un verdadero análisis y contraproducente para el mismo partido porque el candidato tiene que dar respuesta.
Es fácil pensar que, si la decisión hubiera sido ideológica, se hubiera implementado al inicio del gobierno y no al final de la gestión.
Sí, mire, en esto tenemos que ser claros. Al interior del FMLN siempre hubo un sector que pedía que se rompieran relaciones con Taiwán, de hecho, el programa del FMLN, el de Mauricio Funes, ofrecía cambiar de Taiwán a Beijing, a China Popular. Ahí hay un grupo de gente que están abriendo, hoy que ven con Venezuela ya las posibilidades de negocios se han reducido, la posibilidad de encontrar otra fuente, no lo sé, yo no lo puedo juzgar. Pero de que existe dentro del FMLN, a nivel de su dirección, que esto se hiciera, no cabe la menor duda. Ahora, ¿es esa la razón?, no lo puedo afirmar, no soy parte del gobierno.
¿Ve usted peligro o interés de China de establecer una base militar en El Salvador?
No lo creo, su estrategia de expansión, sobre la base de una fuerza militar, es de tipo regional y a lo más que abarca es África, en Somalia y otros dos lugares más en África. La política exterior en China se caracteriza por ser una política muy constante en sus posiciones pero muy cautelosa, en este momento su expansión de tipo militar está centrada sobre todo en torno a su frontera marítima y ahí es donde han sido los problemas más graves en los últimos tres años, que han salido caros a los chinos porque han tenido mucha reacción negativa de los países limítrofes a ellos, empezando por Vietnam, que ha hecho denuncias brutales del imperialismo de los chinos. No creo que están aventurándose a buscar tener bases militares en El Salvador, podrían tener interés en bases comerciales porque su expansión es sobre todo comercial y de inversión. Pudiera ser que interés de ellos y lo que dice el ministro de relaciones exteriores, que como no se quisieron hacer cargo los taiwaneses del Puerto (La Unión), que según él no es viable ya, entonces, quizás los chinos han ofrecido que ellos se van a hacer cargo. Está por medio la licitación, la concesión y ahí creo que se van a poner las cosas claras.
Porque su gran proyecto en Centroamérica, que era el canal de Nicaragua, está ya en el basurero, ese fracasó. Entonces, no les queda otra alternativa, que podrían venir ellos para una base económica en el centro del continente, pues, podría ser el Puerto y, aunque fuera poco viable económicamente, asumir los costos por su proyección geopolítica podría ser, pero aquí estamos especulando, hay que ver los hechos, si los chinos entran a la licitación para la concesión, bajo qué términos y qué va a ser la respuesta de El Salvador.
Se cuestiona que Estados Unidos reacciona contra la decisión cuando mantiene relaciones con China y no con Taiwán. ¿Cómo ve esto?
Por cuatro diputados un poco bulliciosos que salen a dar declaraciones al día siguiente no hay que creerse que es un Estados Unidos. Lo que sí es cierto es que hay preocupación del gobierno de Trump respecto a los avances que China está teniendo en todo Latinoamérica y no creo que les vaya a caer muy bien esto, ya la primera reacción de la embajadora, aunque me parece un poco fuera de lugar, pero es clara que es una reacción negativa. Entonces, ¿va a tomar o no represalias el gobierno de Trump por esta medida? El gobierno de El Salvador debió haberlo previsto de antemano porque, más que relaciones con China, nuestra relación con Estados Unidos es mucho más vital, y si prácticamente el gran socio comercial nuestro es Estados Unidos, eso no se puede cambiar ni en un año ni en diez años. Ahí es donde Estados Unidos tiene más que cobrarnos que nosotros cobrarles a ellos. Pero lo que hay que tener claro es que quien es el principal responsable de esta situación es el gobierno de Trump, porque es este gobierno es el que ha creado una actitud negativa con todos los gobiernos de América Latina y eso ha creado un vacío diplomático que los chinos están aprovechando y se están metiendo en esto. Hace 20 años en África no les ha ido muy bien con sus inversiones, más bien les han salido costosas y ahora están pensando en un área mucho más segura y lo están haciendo con paso acelerado.
¿Cuál es el efecto político electoral de esta decisión en el FMLN?
Habrá que verlo. Romper o no romper relaciones diplomáticas con un país no es un determinante creo yo para que cambie el voto, lo que sí creo es que le crea un problema adicional al gobierno de cara a la población por el problema de falta de transparencia en este tipo de decisiones que modifican 80 años de política exterior de un país; no es cosa fácil de hacer y necesita de una razón muy de peso para poder cortar relaciones con un país que se han tenido por más de 80 años.
¿Cómo interpreta el silencio del presidente mismo y del vicepresidente de la República?
Yo creo que lo que tiene que responder por esto es una investigación seria, tiene que ser el Presidente en última instancia, pero el ministro de relaciones exteriores, que estaba en Beijing, que es otro problema, o sea, ni siquiera le guardaron los nueve días de luto a sus relaciones de 80 años y ya se pusieron a firmar inmediatamente, como que esto estaba preparado de antemano, verdad, es muy feo lo que se está viendo desde el punto de vista diplomático y muy oportunista además, honestamente se lo digo. En el caso de que el Presidente, los ministros y sus asesores los que asuman la explicación al pueblo salvadoreño y en última instancia el Presidente tiene que explicar.