Una familia argentina está en vilo desde el 14 de julio, cuando fueron notificados que su hijo Alejo Arias González, de 24 años, fue detenido por las autoridades de Seguridad en El Salvador, acusado de pertenecer a una banda de estafadores, en su mayoría colombianos.

A el periódico Los Andes, de Argentina, el padre de Alejo, Mauricio Arias, contó que su hijo llegó a El Salvador el 6 de marzo de 2023 para trabajar como “cobrador en una financiera dirigida por ciudadanos colombianos, a través de un contacto familiar que les consiguió ese trabajo”.



Tenía un salario de $600 y el plan de éste argentino era trabajar seis meses o un año, mientras ahorraba y volvía a estudiar a su natal Mendoza, en el país sudamericano.

El joven Alejo decidió viajar a El Salvador porque la economía está dolarizada y buscaba financiar sus estudios superiores.

"Alejo trabajaba como cobrador para esta financiera, tenía una ruta designada con más de 100 personas a las que tenía que cobrarles”, contó la madre del joven, Sandra González al medio de comunicación Vox Populi.

La desesperada mujer dijo que la oferta para trabajar, Alejo la recibió desde El Salvador, que le pagaron los pasajes y luego se los descontaron.
Argentino detenido en El Salvador.
El pasado 17 de julio, la Fiscalía General de la República reveló la detención de 110 personas, de éstas, 105 de nacionalidad colombiana, tres guatemaltecos, un salvadoreño y un argentino, Alejo Arias, acusados de conformar una banda de estafadores, a través de préstamos “Gota a gota”, que cobraban el 20 % diario.

El fiscal general, Rodolfo Delgado, aseguró que cuando los salvadoreños ya no podían pagar eran amenazados, extorsionados, y en el peor de los casos agredidos; sin embargo, exigían que los deudores entregaran cuentas bancarias a su nombre, para seguir haciendo otro tipo de estafas.

La semana pasada, 40 miembros de esta supuesta banda fueron acusados en el Tribunal Sexto contra el Crimen Organizado de los delitos de agrupaciones ilícitas y receptación, pero la fiscalía salvadoreña añadió el cargo de lavado de dinero y activos, porque afirma que esta presunta banda recibía dinero a través de remesas a El Salvador, y además los montos que obtenían de las cuentas bancarias de salvadoreños era enviada a Colombia.

El pasado lunes, el Tribunal resolvió que todos seguirán detenidos hasta que ocurra la audiencia preliminar, que podría rondar entre los seis meses y un año.

Desesperados

La familia afirma que su hijo fue engañado, porque desconocía que la supuesta financiera era ilegal y les preocupa que está incomunicado. Lo único que estos argentinos saben es que su hijo está detenido en “El Penalito”, las bartolinas policiales ubicadas en las cercanías de la Fuerza Naval, en San Salvador.

“A pesar de haber entablado contactos con la Embajada argentina en San Salvador, no han podido obtener respuestas sobre la situación de su hijo y afirman que no ha podido contar con una instancia de defensa”, cita el medio Mendoza Post en su sitio web.

El padre de Alejo dice que están desesperados y atados de manos: “Si viajamos no podemos verlo porque está incomunicado y no lo podremos ver y si hacemos algún tipo de protesta allá nos dicen que podrían detenernos”, expresó Arias a el periódico Los Andes.

El Salvador vive en medio de un régimen de excepción desde el 27 de marzo de 2022, tras más de 80 asesinatos cometidos por la MS-13 y desde entonces, más de 71,000 personas han sido capturadas; sin embargo, más de 5,000 han sido liberados por no encontrar cargos en su contra y más de 160 han fallecido al interior de centros penales.

Organizaciones internacionales han reprochado presuntas violaciones a derechos humanos al interior de las cárceles salvadoreñas.