Policía de Brasil asegura que Bolsonaro tuvo "participación activa" en intento de golpe de Estado en 2022

El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, tuvo "plena conciencia y participación activa" en un frustrado intento de golpe de Estado en 2022 para evitar la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva, según una investigación policial divulgada este martes. La Policía Federal (PF) también detalló que Bolsonaro estuvo al tanto de un presunto plan para asesinar a Lula, su principal oponente político, tras ser derrotado en las elecciones de octubre de ese año. El expresidente, por su parte, rechaza las acusaciones y se considera víctima de una "persecución judicial". De acuerdo con el informe de la policía, Bolsonaro "planeó, actuó y tuvo dominio directo y efectivo" sobre un complot golpista que finalmente no se materializó por "circunstancias ajenas a su voluntad". El documento fue enviado a la Fiscalía General de Brasil para determinar si se presentarán cargos contra Bolsonaro. Además, la investigación indicó que Bolsonaro tuvo conocimiento de la llamada "planificación operativa (Puñal Verde y Amarillo)", supuestamente organizada por un grupo de militares con el objetivo de asesinar a Lula, a su candidato a vicepresidente, Geraldo Alckmin, y al juez de la Corte Suprema, Alexandre de Moraes. La policía recomendó procesar a otras 36 personas, entre ellas, varios militares y asesores cercanos a Bolsonaro, por su presunta implicación en los hechos investigados. Según las indagaciones, en diciembre de 2022, el intento de golpe fue "abortado" en el último momento debido a la falta de apoyo institucional por parte de los altos mandos del Ejército.

"No está en mi diccionario"

Bolsonaro negó las acusaciones, afirmando que nunca discutió un golpe de Estado. "La palabra 'golpe' nunca estuvo en mi diccionario", dijo el lunes a los periodistas. Además, argumentó que un golpe "tendría que involucrar a todas las fuerzas armadas" y no ser llevado a cabo por "un general de reserva y media docena de oficiales". El juez Moraes envió el documento de la investigación, que abarca casi 900 páginas, a la fiscalía y levantó el secreto de sumario para que fuera publicado. Ahora, corresponde al fiscal general, Paulo Gonet, decidir si procesa a Bolsonaro y a los demás investigados por los delitos mencionados, si archiva el expediente o si solicita más investigaciones. A su vez, Bolsonaro acusó a Moraes, a quien considera su enemigo político, de actuar de manera ilegal para evitar su regreso al poder. El exmandatario planea postularse nuevamente en las elecciones presidenciales de 2026, pero se encuentra actualmente inhabilitado debido a una condena por haber cuestionado sin pruebas la fiabilidad del sistema electoral brasileño.