La Fiscalía de Roma abrió una investigación contra el exfutbolista italiano Francesco Totti y su actual pareja, Noemi Bocchi, por un presunto abandono de menores tras una denuncia interpuesta por Ilary Blasi, expareja del exjugador. Los hechos ocurrieron en mayo de 2023, aunque el Ministerio Público ha solicitado el cierre del caso al considerar que no existió riesgo real para los niños.

De acuerdo con medios italianos, la denuncia sostiene que Totti y Bocchi habrían dejado sin supervisión a tres menores mientras acudían a un restaurante, entre ellos la hija de Totti y Blasi, de siete años, y los hijos de Bocchi, de 9 y 11. Blasi, quien se encontraba fuera del país, se comunicó con su hija y descubrió que no había un adulto en casa, por lo que alertó a la policía.

Aunque los agentes se desplazaron al lugar, no ingresaron al domicilio ni verificaron el estado de los menores. La investigación también involucra a la niñera, quien en un principio aseguró estar presente en el apartamento para justificar la ausencia de los adultos, versión que luego fue desmentida por la prensa.

Según la Fiscalía, la niña tenía un teléfono móvil para reportar cualquier emergencia y estaba acompañada por los hijos de Bocchi. Además, la niñera, aunque no estaba dentro del apartamento, vivía en el mismo edificio. Para los fiscales, estas condiciones fueron suficientes para descartar una situación de peligro.

Los abogados de Ilary Blasi no están conformes con el dictamen del Ministerio Público y han interpuesto un recurso legal, argumentando que la menor permaneció completamente sola durante varias horas en una vivienda grande, sin vigilancia efectiva.

Será el próximo 1 de diciembre cuando un juez italiano decida si archiva el caso de forma definitiva o permite que el proceso judicial continúe.