Conamype explicó en redes sociales que en total se benefició a 50 personas procedentes de los departamentos de Ahuachapán, Sonsonate, Santa Ana, San Salvador, La Libertad, Cabañas, San Vicente, Chalatenango, Usulután, Morazán, San Miguel y La Unión.
Cada bono rondó los $2,000, y deberán ser utilizados para “fortalecer sus capacidades productivas” e implementar estrategias de innovación en sus procesos.
“Estos fondos forman parte de un esfuerzo integral para mejorar la competitividad del sector artesanal en todo el país”, indicó la autónoma.
La Comisión indicó que los fondos otorgados son parte del convenio “Promover y consolidar empresas del sector artesanal mejorando la oferta comercializable de productos con mayor valor agregado”.
Pieza en el desarrollo
El presidente de Conamype, Paul Steiner, recordó que el gobierno también impulsa talleres de formación para este sector empresarial.Steiner espera que los artesanos se conviertan en fuentes de empleo y aporte al crecimiento económico de El Salvador.
Una investigación publicada por Conamype en mayo reveló que este tipo de empresas se caracterizan por estar impregnadas de cultura.
El gobierno evidenció que existen dificultades para este sector entre problemas de financiamiento, poca liquidez y un bajo nivel de alcance con los clientes. A este sector también le perjudica el reducido acceso a tecnología de producción.
La investigación apuntó a que solo un 14 % de las empresas artesanales salvadoreñas exporta, mientras que, de esta porción, solo un 2 % lo hace de forma directa.
Conamype aseveró que un 77.6 % de las ventas de productos se hacen a nivel nacional, mientras que un 23.9 % se envía a América del Norte y un 16 % a Centroamérica.