Los ingresos tributarios y contribuciones -un termómetro de la actividad económica- rebasaron los $6,285.4 millones en los primeros once meses del año, equivalente a $216.4 millones adicionales que llegaron al fisco salvadoreño en comparación con el mismo período de 2022.

El último reporte, publicado esta semana en Transparencia Fiscal, señala que los ingresos tributarios experimentaron un crecimiento interanual de un 3.6 %, una tasa que es 3.7 veces inferior al desempeño histórico registrado en 2022 al mismo mes, cuando fue de 13.4 %.

El Ministerio de Hacienda registra que los ingresos tributarios dejaron $265.5 millones (un 4.4 %) adicionales respecto a la proyección presupuestaria.

De enero a noviembre, el fisco recibió $6,570.9 millones en ingresos corrientes y contribuciones, una categoría que abarca los resultados tributarios y no tributarios -sacar DUI o tasas-. Hacienda registra que esta cifra fue de $294.2 millones (un 3.6 %) adicionales frente a 2022 y $265.5 millones (un 4.4 %) que en el presupuesto.

Solo en noviembre se recibieron $522.4 millones, al menos $8.5 millones (un 1.65 %) adicionales a octubre a pesar de que es un mes de temporada alta por las órdenes de exportaciones previo a las festividades de fin de año.

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IVA y renta.

Los ingresos tributarios son un reflejo de la dinámica económica, cuya mayor carga recae en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el Impuesto sobre la Renta (ISR). El IVA depende básicamente de la capacidad de compra de las personas y las empresas, mientras que el ISR se cobra sobre los ingresos de los empleados y ganancias.

De acuerdo con Hacienda, los ingresos por IVA llegaron a $2,901.3 millones entre enero y noviembre, con una representación de un 46.1 % del total. Esta cifra significó un crecimiento de $129.5 millones (un 4.7 %) respecto al desempeño de 2022 o $202.2 millones (un 7.5 %) adicionales a las proyecciones presupuestarias.

Los ingresos por renta llegaron a $2,683.1 millones, equivalente a $84.2 millones (un 3.2 %) más que hace un año. En cuanto a las proyecciones presupuestarias, este impuesto dejó $84.5 millones adicionales (un 3.3 %).

Los impuestos selectivos al consumo dejaron $212.6 millones a las arcas del Estado. Este resultado mostró un crecimiento de $4.4 millones (2.2 %) en comparación con 2022, pero frente a las proyecciones presupuestarias quedó en negativo, con $19.3 millones menos (un 8.3. %).

En esta categoría se incluyen los ingresos por la venta de productos alcohólicos, cerveza, cigarrillos, gaseosas y bebidas no carbonatadas, armas y municiones, y combustible. A noviembre, hubo una menor recaudación en gaseosas y armas.

El dato

Los ingresos no tributarios sumaron $285.5 millones, $77.8 millones (un 37.4 %) adicionales respecto a 2022. Sin embargo, con la proyección presupuestaria disminuyeron en $148.8 millones (34.3 %).