La recolección de café en los primeros dos meses de la cosecha 2023-2024 inició con pie izquierdo, con un desplome de un 72 % que la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal) atribuye a un retraso en la corta debido a El Niño.

Entre octubre y noviembre de 2023, los caficultores reportaron al Instituto Salvadoreño del Café (ISC) una producción de 75,723 quintales oro uva, una reducción de 198,472 quintales respecto a los 274,195 recolectados en el mismo período de 2022-2023.

Sergio Ticas, presidente de Acafesal, descartó a Diario El Mundo que se trate de una emergencia, sino que más bien los productores han retrasado los trabajos de corta porque el grano aún no se encuentra maduro en buena parte de las fincas.

Debido a las lluvias entre febrero y abril de 2023, las plantas de café echaron flores, pero “abortaron” porque el invierno se retrasó por el fenómeno climático de El Niño. De esa manera, los cafetos entraron en estrés hídrico y se lograron reponer cuando las precipitaciones se normalizaron.

Al inicio de la cosecha 2022-2023 ocurrió lo opuesto, pues los productores aceleraron los trabajos de corta por temor a perder el grano debido a la salida copiosa del invierno. El exceso de lluvias ocasiona que los granos se rajen y se caigan.

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Proyección.

Tradicionalmente, el año cafetero va de octubre a junio del siguiente año, una de las actividades agrícolas que más dinamiza la economía local por la generación de empleo. Los meses más productivos son octubre, noviembre, diciembre y enero. Lo recolectado hasta la fecha, según el ISC, es la cifra más baja desde el ciclo 2022-2021.

Ticas vaticina que la corta del “grano de oro” se recupere entre enero y febrero, aunque advierte que la producción del ciclo 2023-2024 volverá a caer y prevé que finalice entre los 750,000 y 800,000 quintales.

Para los trabajos en los primeros meses, se ha requerido el apoyo de 3,786 empleos permanentes.

El recién ciclo 2022-2023 finalizó en 878,560 quintales de café, inferior en 43,480 quintales (un 4.7 %) a los resultados en el año cafetero 2021-2022. De acuerdo con los historiales del ISC, se trata de la producción más baja de las últimas cuatro cosechas, desde 2018-2019.

Asimismo, Ticas aseguró que un 20 % de los caficultores salvadoreños han bajado la “guardia” y trabajan las fincas en sus mínimos debido a los precios internacionales del café, que durante 2023 promediaron $169 por quintal en el Contrato C, cotizado en la Bolsa de Valores de Nueva York.

¿Dónde se cultiva?

El Salvador tiene seis cordilleras productoras, con un parque cafetalero que abarca 164,203 manzanas.

El ISC reporta que Apaneca-Ilamatepec es la región más productiva, con una participación de un 48 % en el ciclo 2022-2023, al dejar 421,709 quintales de café.

Después se encuentra El Bálsamo-Quezaltepeque, con una producción de 210,854 quintales que equivalen a un 24 %, seguido de Tecapa-Chinameca con 105,427 quintales, un 12 %.

Cacahuatique y Alotepec-Metapán tienen una participación de un 5 %, respectivamente, con una producción similar de 43,928 quintales, mientras que Chichontepec registra 52,714 quintales, con una tasa de un 6 %.