Las autoridades informaron que estas tormentas afectan a Illinois, California, Oregon, Wisconsin y Nueva York. Además, señalaron que se espera que estas duras condiciones climáticas continúen hasta el próximo sábado.
Muchas personas tuvieron que ser rescatadas por inundaciones, árboles caídos y casas derribadas. En las carreteras muchos conductores quedaron atrapados por las malas condiciones de las calles, lo cual impedía el libre tránsito de los automovilistas.
Muchas aerolíneas también reportaron la cancelación de vuelos, debido a la imposibilidad de volar y el riesgo que podía representar para los pasajeros. Hasta la tarde de este jueves, más de 1,000 vuelos fueron cancelados, según información que recoge la cadena Univision.
Las viviendas y el sistema de energía eléctrica fueron duramente golpeados, según los reportes de autoridades, aproximadamente un millón de personas sufrieron apagones y más de la mitad ha quedado temporalmente sin servicio de energía.
“Dada la profundidad del aire frío que se ha infiltrado en el oeste, también se espera que se acumule nieve en algunas de las colinas más bajas y en las áreas del interior del valle cerca de la costa del Pacífico adyacentes al terreno donde las nevadas son menos comunes”, declaró el servicio meteorológico.
Los meteorólogos advirtieron que las temperaturas podrían descender hasta los -29 grados Celsius esta noche, y hasta -32 grados celsius el viernes. También señalaron que las ciudades que no reciben nieve pueden ser afectadas por cantidades peligrosas de hielo, las cuales pueden poner en riesgo la vida de las personas.