La administración de Texas dirigida por el gobernador Greg Abbott, informó este viernes, que durante los siete meses de 2023, el Estado ha desplazado a más de 28,000 migrantes hasta diferentes ciudades denominadas santuarios dentro de Estados Unidos, la mayoría de estos migrantes son personas que buscan aplicar a los pedidos de asilo dentro del territorio estadounidense.

“Texas ha transportado en autobús a más de 28,000 migrantes a ciudades santuario para aliviar a las comunidades fronterizas abrumadas y desbordadas”, escribió Abbott en su cuenta de Twitter.

El gobernador detalló que han desplazado más de 10,600 migrantes a Washington DC, 10,500 a Nueva York, 4,300 a Chicago, 2,000 a Filadelfia, 350 a Denver y 240 a Los Ángeles.

Estos traslados masivos muchas veces son considerados inhumanos por las organizaciones promigrantes, porque en reiteradas ocasiones los migrantes han sido desplazados por más de 48 horas en autobuses, sin recibir alimentación o espacios de descanso.

Muchas de las ciudades que reciben a los migrantes también luchan por ampliar la capacidad de respuesta ante tantas personas desplazadas, en muchas localidades los gobernadores han habilitado iglesias, campamentos provisionales, orfanatos, cárceles y casas comunes como refugios migratorios, debido a la alta demanda de personas que llegan diariamente.

Inicio de los desplazamientos

Los desplazamientos masivos de migrantes comenzaron desde marzo del 2022, cuando el gobernador Abbott argumentó que el traslado de los indocumentados era una medida para mantener “el orden y la seguridad” de los pobladores de Texas, además de una afrenta contra el presidente Joe Biden.

Muchos gobernadores demócratas en diferentes ocasiones arremetieron contra Abbott, porque aseguran que las medidas implementadas por el gobernador texano son una muestra de una política “antiinmigrante”, y en la cual utiliza a los indocumentados como objetos políticos.

Abbott aseguró en reiteradas ocasiones que el problema se generó por la mala administración del presidente Joe Biden, que según él, desarrolló una mala gestión en el manejo de la crisis migratoria en la frontera entre EEUU y México.