La Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) de El Salvador externó su solidaridad con la Universidad Centroamericana (UCA) de Nicaragua, que este miércoles, suspendió todas sus actividades luego de que un tribunal del régimen de Daniel Ortega ordenara la confiscación de sus bienes y fondos, tras acusarla de ser un "centro de terrorismo".

La UCA salvadoreña se sumó al pronunciamiento de la Provincia Centroamericana de la Compañía de Jesús que rechaza las acusaciones del régimen de Daniel Ortega contra el centro de estudios superiores, las que califican como “falsas e infundadas”.

“La prestigiosa labor docente e investigativa ejercida por la Universidad durante 63 años de existencia sido reconocida nacional o internacionalmente , se ha realizado conforme la tradición educativa de la Compañía de Jesús y las orientaciones de la Iglesia católica”, defendió la comunidad jesuita de la región.

“La confiscación de facto de la UCA es el precio por pagar por la búsqueda de una sociedad más justa, proteger la vida, la verdad y la libertad”, reitera la orden religiosa.

“Esta nueva agresión gubernamental en contra de la Universaidad no es un hecho aislado; forma parte de una serie de ataques injustificados en contra de la población nicaragüense y de otras instituciones educativas y sociales de la sociedad civil que están generando un clima de violencia e inseguridad y agudizando la crisis sociopolítica del país”, denuncia la comunidad jesuita centroamericana.

En el mismo pronunciamiento exigen al gobierno de Daniel Ortega “revertir” las medidas contra la UCA en Nicaragua y le recuerdan que “se trata de una política gubernamental que está violando sistemáticamente los derechos humanos”.