Nacido en Houston, Texas, e hijo de padres inmigrantes, Guerrero se destacó por su dedicación y talento. Con apenas 19 años, se mudó a Los Ángeles con el sueño de alcanzar la cima en su profesión, comenzando su carrera peinando a novias y en eventos familiares.
Su habilidad y estilo inconfundible pronto captaron la atención de influencers, lo que impulsó su ascenso en la industria.
Su carrera despegó cuando se convirtió en el peluquero de confianza de la empresaria e influencer estadounidense, Kylie Jenner, una de las figuras más influyentes del entretenimiento e integrante del clan Kardashian.
A partir de ahí, su lista de clientas se amplió, trabajando con estrellas como la cantante española Rosalía, la diva del Bronx, Jennifer López, Katy Perry y la nominada al Óscar 2025, Demi Moore.
Su capacidad para crear looks icónicos lo convirtió en uno de los estilistas más solicitados de Hollywood. Rosalía, visiblemente afectada, expresó su dolor en redes sociales: "No sabes cuánto te voy a extrañar", escribió junto a una foto con el estilista, reflejando la estrecha relación que construyó con sus clientes. Una de sus últimas colaboraciones fue con la cantante Kaliuchis, para los Premios Grammy 2025.
Legado
Más allá de su talento profesional, Guerrero era recordado por sus seres queridos como un hijo, hermano y amigo inigualable. Su hermana, Gris Guerrero, confirmó la noticia del fallecimiento y lanzó un crowdfunding para cubrir los gastos del funeral, logrando recaudar cerca de 50.000 euros ($52,502.00).La repentina muerte de Guerrero deja un legado de inspiración, demostrando que con trabajo duro y pasión es posible alcanzar el éxito. Su historia, marcada por el esfuerzo y la creatividad, continuará siendo un referente para futuras generaciones en el mundo del estilismo.