El Salvador cumplió ayer 80 días de cuarentena. Se espera que el 16 de junio, con la reactivación propuesta, la actividad productiva del país alcance un 40 %, el doble de la capacidad actual. / DEM


El Ministerio de Trabajo y Previsión Social (MTPS) confirmó que sigue en firme el plan de reapertura gradual de la economía para el próximo martes 16 de junio.

El titular del ramo, Rolando Castro, confirmó que, a menos ocho días del inicio de reapertura, la entidad que preside sigue en reuniones con la Mesa de Reactivación Económica que el jueves se reunirá con representantes del sector informal

Castro explicó que, tal como ocurrió el lunes con la sesión con la gran empresa y gremiales empresariales, también darán un tiempo para incorporar sugerencias de parte de los líderes del sector informal que es uno de los mayores empleadores, pero que se caracteriza por ser atomizado y con muchos menos recursos que las empresas formales.

La reunión con representantes del sector será este jueves 11 de junio en las oficinas del Ministerio de Trabajo.

El funcionario, en entrevista en Radio 102.9, reiteró ayer que el Ministerio de Trabajo ya cuenta con los protocolos generales y específicos para el reinicio de operaciones y que se avanza en el plan de reactivar formalmente a los sectores desde el 16.

El cronograma presentado por la Presidencia no habla con claridad de una reapertura del sector, al respecto, Castro dijo que la ruta propuesta se define por rubros, pero advierte que uno de los retos es la aglomeración, por ejemplo, de las ventas callejeras en zonas como el centro de San Salvador.

“El país, como tal es hacinado, la parte urbana es lo más complejo que hay (...) En el sector informal o los trabajadores por cuenta propia hay unos niveles de hacinamiento grandes, tenemos los protocolos y necesitamos dialogar con ellos”, dijo.

Guadalupe, una vendedora de pan artesanal en la zona sur de San Salvador, es una de las que ha regresado a trabajar antes de que termine la cuarentena.

Aunque el rubro no estaba paralizado dejó de hacer sus recorridos cuando inició la restricción de circulación entre municipios. La mujer, de más de 35 años, camina diariamente varios kilómetros con su canasto de pan. Usa una mascarilla y procura llevar producto en bolsas -según su valor- y aunque busca protegerse y tiene temor de contagiarse no lleva consigo alcohol en gel y debido a su actividad no puede lavarse las manos constantemente. En su lugar, cuando requiere manipular producto individual usa una bolsa a modo de guante.

En las últimas semanas, incluso antes de la emergencia por la Tormenta Tropical Amanda, empleados por cuenta propia han comenzado a llegar de nuevo a las calles, a los habituales vendedores de frutas y verduras se han sumado otros que antes estaban en el sector formal o que dependen de actividades restringidas por la cuarentena. En San Salvador y otros núcleos urbanos relevantes las actividades comienzan a abrirse sin protocolos.

En sus propuestas de reactivación, tanto la Escuela Superior de Economía y Negocios (ESEN) como el INCAE Business School recalcaron en la necesidad de que haya campañas masivas que involucren al Gobierno central y las municipalidades, con mensajes sencillos pero presentes para hacer hincapié en el lavado de manos, distanciamiento social y el uso de mascarillas.

Everardo Rivera, director general de la ESEN, sugirió en mayo que las campañas deben extenderse incluso a los usuarios por que a veces los riesgos no necesariamente están en los empleados. “Es necesario una educación a nivel de toda la sociedad”.

Roberto Artavia, presidente del consejo directivo del INCAE Business School y Viva Trust, dijo el mes pasado que todavía es imposible retomar las actividades sin riesgos, pero que debe abrirse para no profundizar más la caída de los indicadores económicos y sociales.