Diario El Mundo constató desde primeras horas cómo los empleados judiciales llegaron a las afueras de las instalaciones de sus antiguas sedes judiciales y esperaban una notificación de las autoridades sobre su nuevo traslado a otras oficinas.
En grupos y entre preguntas, los empleados estaban a la "deriva", ya que no tenían carga laboral asignada este 1 de junio, la fecha establecida para la entrada en vigencia de las reformas a la Ley Orgánica Judicial aprobadas por la Asamblea Legislativa, que creó 11 nuevos juzgados de Crimen Organizado y dos Tribunales de Garantías para la intervención de las Telecomunicaciones.
"Incertidumbre, porque no han asignado los lugares específicos de trabajo, ya tuvo que haber una asignación, pero no existe ahorita", afirmó una empleada de un Juzgado Especializado de Instrucción que se integra a uno de Crimen Organizado.
Explicó que desde tempranas horas, los empleados se reunieron con autoridades de la "Unidad Técnica", quien supuestamente les asignará sus obligaciones, sin embargo, no habían tenido una respuesta oportuna.
"Desde ayer tuvieron que habernos dicho para donde íbamos ahora...ahorita solo estamos a la espera que nos digan...a más tardar el lunes que tenemos que estar asignados a cualquiera de las sedes que nos enviarán".
Empleada Judicial.
Los empleados aseguraron que ningún juzgado de los que se integran a los nuevos, se llevó a todos sus empleados. Detallaron que cada juez se llevó a un máximo de cuatro colaboradores de confianza, el resto sería redistribuido.
"Los que nos han reunido somos los que tenemos plaza por ley de salarios, hasta ahorita no hemos visto que nos vayan a despedir, o al menos ese es el discurso oficial, no sabemos qué vaya a pasar", añadió un empleado de un juzgado de instrucción que desapareció.
Aún este jueves, empleados reordenaban y trasladaban mobiliario de las antiguas sedes judiciales. / Lisbeth Ayala.
De igual manera los empleados que ya tenían establecido a qué sede se integrarían, llegaron desde tempranas horas, aún cuando se realizan remodelaciones en las oficinas. Los empleados afirmaron que estaban aún a la espera de conocer sobre expedientes judiciales.
¿Qué dice la ley?
En el artículo 7 de la reforma a la ley orgánica para la conversión de los juzgados de paz, creación de los juzgados de garantías y la competencia del crimen organizado establece que será la Corte Suprema de Justicia (CSJ) decidirá sobre el personal de las sedes judicial, y si este cumple con los requisitos establecidos para que se integren la nómina de los nuevos juzgados.De igual forma, el artículo 8 dice que se garantizará el pleno respeto de los derechos laborales de todo el personal que no cumpla con el perfil para integrarse a los nuevos juzgados, en referencia que serán reubicados en sedes judiciales o administrativas cercanas, sin rebajas salariales y con el sueldo acorde a sus funciones, bajo contrato asegurando su continuidad sus labores.
Diario El Mundo preguntó sobre las reasignaciones de empleados judiciales al magistrado presidente de la Corte Suprema de Justicia, Óscar López Jeréz, pero al cierre de esta nota no respondió los mensajes enviados a su celular.
¿Qué juzgados desaparecen?
Para conformar las nuevas sedes judiciales, los Juzgados Sexto, Séptimo y Octavo de Instrucción desaparecen desde el 1 de junio, y pasan a convertirse en Crimen Organizado. De igual forma, desaparecen los Juzgados Décimo Tercero de Paz y el Décimo Cuarto de Paz para convertirse en Tribunal Primero y Segundo de Garantías de San Salvador, los cuales estarán ubicados siempre en el Centro Judicial “Isidro Menéndez”.
También desaparecen los Juzgados Especializados de Instrucción A, B y C; los especializados de apoyo A2, A3, A4, B2, B3, B4, C2, C3 y C4; los especializados de Sentencia A, B y C, que ya conocían casos de crimen organizado.