Las autoridades de Seguridad de El Salvador establecieron que los 429 kilos de cocaína, encontrados enterrados el martes en la playa El Espino, al sur de Usulután, tienen un valor en el mercado de $10 millones, y pertenecen a una red regional de traficantes de drogas que es investigada desde 2021.

El ministro de Seguridad y Justicia, Gustavo Villatoro, explicó en la Base Policial Storm en La Paz, a donde fue llevada la droga, que a esta red de traficantes “se le viene dando seguimiento desde el 2021, donde se le han hecho diferentes incautaciones y en lo que va del presente año, junto con esta ya son más de 600 kilogramos los que se le han incautado”.

Tras la ubicación de la droga enterrada en la arena, agentes de las Divisiones de Policía Costera y Antinarcóticos de la PNC, capturaron a Benjamín Franklin Blandón Ramirez, de 36 años de edad, vinculado por las autoridades al hallazgo de la cocaína.

“Es una estructura de tráfico regional de cocaína, que mueve la droga desde Costa Rica y Nicaragua hasta su estación en El Salvador, para luego seguir su tránsito a Guatemala”, aseguró Villatoro al explicar la ruta que esta red sigue para movilizar sus cargamentos.

Villatoro advirtió que “todos aquellos que se dediquen a vender, transitar, guardar, almacenar o llevar hacia a otros países van a ser intervenidos y sometidos a la justicia salvadoreña”.

En 2022 El Salvador reportó el decomiso de droga más importante de los últimos diez años con una incautación anual 12.8 toneladas de diferentes tipos de droga.