Los condenados fueron procesados por 14 homicidios agravados, siete casos de proposición y conspiración y por organizaciones terroristas. Los delitos fueron cometidos entre 2008 y 2018 en San Rafael Oriente en San Miguel.
Entre los condenados está Amílcar Ariel Rivera Garay, alias el apóstol, quien fue condenado a 334 años de prisión por siete homicidios agravados, seis casos de conspiración para cometer homicidios agravados y por organizaciones terroristas.
Además, se condenó a Javier de Jesús Chávez, alias el discreto, con 184 años de prisión por tres homicidios agravados, cinco casos de conspiración en homicidios agravados y organizaciones terroristas. También está Kelvin Antonio Parada Campos, alias chucho, quien cumplirá una sentencia de 155 años por cuatro homicidios agravados, dos casos de conspiración y organizaciones terroristas.
Asimismo, se condenó a Santos Rigoberto Zavala Hernández, alias el grifo, con prisión de 142 años; Sergio de Jesús Orellana Soriano, alias el choky; José Marlon Rodríguez Aparicio, alias sereno y Lorenzo Ernesto Moreira Garay, alias el travieso, fueron condenados a 118 años de cárcel cada uno por tres homicidios agravados, una conspiración para cometer el delito de homicidio agravado y organizaciones terroristas.
Los demás condenados cumplirán penas de prisión que van desde los ocho años por los mismos delitos.
La FGR informó que entre los crímenes cometidos está el asesinato “por error” de un entrenador el 13 de agosto de 2017 en la cancha de baloncesto del parque central de San Rafael Oriente y el secuestro y asesinato de una mujer en el mismos municipio, los restos de la víctima fueron encontrados en el caserío La Golondrina en el barrio El Calvario en el referido municipio.