La repentina muerte de una estudiante del doctorado en medicina de la Universidad de El Salvador, ha despertado conmoción en sus compañeros de clase, de otras universidades que hacen sus prácticas en hospitales y del mismo gremio médico.

La muerte de la joven fue confirmada por la misma Alma Máter, quien este martes publicó una esquela con condolencias: “Autoridades de la UES y comunidad universitaria expresamos nuestro sentido pésame por esta irreparable pérdida y envíamos nuestra solidaridad a la familia”, se lee en la publicación.

Sin embargo, comentarios en redes sociales señalan que se trató de un suicidio, que tuvo su origen en el acoso, y la sobrecargas laborales a los que están sometidos los estudiantes de medicina, cuando hacen sus prácticas de externado e internado en las rotaciones hospitalarias.

La Asociación de Estudiantes de Medicina “Dr. Emilio Álvarez” (ASEMEA) de la Universidad de El Salvador compartió otra esquela donde señala que la estudiante era interna y hacía su rotación en pediatría: “Estimada por sus compañeros y amigos. Pedimos al creador que brinde consuelo y resignación a su familia y seres queridos, en este difícil momento”, señala la asociación.

En esa publicación, los internautas señalan que se deben erradicar los abusos, que escalan a la salud mental de los estudiantes de medicina, dejando entre ver las causas del hecho.

“Los internos son tratados de lo peor por los supuestos docentes, trapean el suelo con ellos, el que sale vivo del internado es por (que) Dios es grande. No existen palabras de consuelo para (la) familia en un momento como este”, comento una usuaria identificada como Marbely en la publicación de ASEMEA en Facebook.

Incluso, la exdirectora del Fondo Solidario para la Salud (Fosalud), Verónica Villalta, señaló que la atención a la salud mental debe iniciar por los formadores y jefes de los estudiantes. “Debe haber humanización de la medicina para docentes y estudiantes, para sobrellevar esta carga laboral, mas con pandemia”, escribió.

Otra de las usuarias, identificada como Beatriz relató que ella tuvo que dejar la carrera porque sentía “opresión y una sensación de muerte”. “Tuve el valor de tomar una decisión y logré salir adelante. Con el tiempo me enteré que el médico de staff había dicho: ‘Que ni se le ocurra regresar”, comentó.

Los usuarios de redes sociales reclaman a la Universidad de El Salvador que investiguen qué ocurrió con la estudiante universitaria, a punto de terminar su doctorado en medicina, y que individualicen responsabilidades si ocurrió acoso o maltrato hacia ella.