Un segundo informe de Cristosal reveló ayer que hasta el 25 de mayo ocurrieron 20 muertes al interior de las cárceles, de los reos detenidos durante el régimen de excepción y esto equivale a un “alarmante incremento de las violaciones a la vida”.

La organización señala que la mayoría de estas muertes son violentas o provocadas por falta de medicamentos o provisión de atención médica.



Desde el 27 de marzo hasta el 25 de mayo, también registraron un total de 743 casos denunciados, y afirman que en las detenciones hay patrones de malos tratos y que esa práctica se ha hecho más recurrente a partir del segundo periodo del régimen de excepción.

Añaden que preocupa la situación de personas con enfermedades crónicas que han sido detenidos, y la probabilidad de que puedan fallecer sino reciben atención médica.

Otra prórroga.

El pasado 25 de mayo, la Asamblea Legislativa aprobó, por segunda vez, una prórroga al régimen de excepción por 30 días, que finalizará a finales de junio. En todo el periodo especial, las autoridades de seguridad ya acumulan más de 40,000 detenciones, a quienes acusan de agrupaciones ilícitas, principalmente.

En el primer periodo del régimen de excepción, los diputados aprobaron una ampliación a las penas de delitos, en caso de comprobarse que el acusado se trate de pandilleros.

Recientemente, el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro, afirmó que pedirá extender el régimen de excepción, “las veces que sean necesarias”.