La noche de este Viernes Santo cientos de fieles católicos se volcaron al Centro Histórico de San Salvador para participar en la procesión del Santo Entierro, una de los momentos religioso más sentidos en el que se recuerda la muerte de Jesus de Nazaret.

La capital, despejada de ventas y la seguridad reforzada sazonó la intensión de salvadoreños y extranjeros para vivir de cerca las procesiones católicas, y las estampas también se repitieron en otras ciudades como San Miguel, Santa Ana, Sonsonate y Ahuachapán.

El Gobierno aseguró este viernes que mantiene “un despliegue institucional en eventos religiosos con más de 100,000 personas de las diferentes instituciones del Sistema Nacional de Protección Civil”.

La multitud de visitantes en San Salvador era notoria a medida avanzaba la procesión del Santo Entierro. Foto FA
La multitud de visitantes en San Salvador era notoria a medida avanzaba la procesión del Santo Entierro. Foto FA


En la ciudad de Ahuachapán también los católicos revivieron el Santo Entierro. Cortesía Gobernación
En la ciudad de Ahuachapán también los católicos revivieron el Santo Entierro. Cortesía Gobernación


El Santo Entierro en San Miguel también reavivó la fe de los católicos. Cortesía Gobernación
El Santo Entierro en San Miguel también reavivó la fe de los católicos. Cortesía Gobernación


Fieles recorrieron varias cuadras desalojadas de la capital durante la procesión del Santo Entierro.SDP
Fieles recorrieron varias cuadras desalojadas de la capital durante la procesión del Santo Entierro.SDP


La celebración de la Semana Santa en Sonsonate es Patrimonio Cultural Religioso del país, y su Santo Entierro es un íncono religioso históricos. SDP
La celebración de la Semana Santa en Sonsonate es Patrimonio Cultural Religioso del país, y su Santo Entierro es un íncono religioso históricos. SDP


La solemnidad del Viernes Santo también envolvió a los fieles de San Vicente. SDP
La solemnidad del Viernes Santo también envolvió a los fieles de San Vicente. SDP


La concurrencia en la capital era notoria. Cortesía AMSS
La concurrencia en la capital era notoria. Cortesía AMSS