El médico indicó que los índices larvarios se miden de acuerdo al número de casas reportadas con reservorios de larvas del insecto.
“El promedio nacional es aproximadamente de 9.5 de 100 inspeccionadas, tienen reservorio de zancudo en casa, eso es elevado”, detalló el infectólogo.
El especialista explicó que el índice “aceptable” de recipientes que reportan criaderos de zancudos es cuatro, para decir que la enfermedad se pueda controlar, por lo cual, “estamos en riesgo que se pueda dar un brote de dengue”, enfatizó Solano.
Aunque los casos de dengue no han superado los de años anteriores, los salvadoreños tienen recipientes con agua infestados de larvas de zancudos. De acuerdo al último boletín epidemiológico completo del Ministerio de Salud, el departamento de San Salvador reporta mayor reservorio de zancudos con 24 viviendas, a este le sigue Chalatenango con 12, Santa Ana y Cabañas con 11.
Respecto a los tipos de recipientes identificados con reservorios de larvas, el 78 % de los lugares donde se identificaron fue en recipientes útiles, el 17 % en inservibles, 3 % en llantas y 2 % en naturales.
“Recordemos que muchos salvadoreños incluyendo los del área urbana, más del 50 % no recibimos agua potable las 24 horas del día, por lo tanto, guardamos agua en recipientes y si no los protegemos de la manera adecuada ahi si se crea el zancudo”, expuso Solano.
Pese a que debido al fenómeno de El Niño ha reducido la cantidad de lluvias, el índice larvario se encuentra arriba de lo controlable, por lo que el infectólogo considera que de presentarse más frecuente las lluvias, los índices podrían incrementar aún más, y por consiguiente a que se reproduzcan más insectos transmisores del dengue.
Hasta el 22 de julio (último boletín) se contabilizan 3,315 casos sospechosos de dengue, 16 casos confirmados y 428 hospitalizaciones por la enfermedad del vector.