La jueza de Segunda Instancia de San Francisco Gotera, Mirtala Teresa Portillo de Cruz, revocó la orden de excarcelación en favor del exdiplomático y crítico del Gobierno, Rubén Zamora, y volvió a girar la orden de captura, confirmó la familia a Diario El Mundo.

“Sí, es terrible, ni siquiera se les notificó", confirmó una de las hijas, y agregó que “no hay seguridad jurídica ni Estado de derecho en El Salvador”.

La orden de detención es porque Zamora conformó la junta directiva de la Asamblea Legislativa de 1993, por el delito de encubrimiento personal, al aprobar la Ley de Amnistía en favor de los principales imputados de la matanza conocida como El Mozote, ocurrida en diciembre de 1981.

La orden de excarcelación se hizo pública el pasado 31 de enero cuando anularon la orden de captura, sin embargo, la nueva orden de detención fue a solicitud de la Fiscalía General de la República. La resolución fue divulgada por la directora de la organización Human Rights Watch, Juanita Goebertus, y dice que se vuelve a girar la orden de captura debido “que las condiciones que fundaron el beneficio de la excarcelación han sido alteradas o variado con la nueva información que aporta la Fiscalia General de la República, se dejará sin efecto el beneficio de excarcelación concedido y en su lugar se restaurará el estatus quo de la detención provisional adoptada”.

El pasado 1 de febrero, Rubén Zamora aseguró en conferencia de prensa que la orden de detención tenía como objetivo “callarlo”.

Zamora afirmó que sabe quién le ordenó a la jueza que girara esa orden de captura, que calificó sin fundamento; sin embargo, no dio nombres, solo expresó que en su momento lo revelará. Añadió que planeaba una denuncia contra la jueza.

El origen

El pasado 22 de diciembre, el Juzgado de Instrucción de San Francisco Gotera ordenó la detención provisional a Zamora, de igual forma al expresidente Alfredo Cristiani y otros exdiputados de ese entonces , todos acusados de ayudar, en calidad de miembros de la junta directiva de la Asamblea Legislativa, a los principales acusados de la masacre con la aprobación de la Ley de Amnistía.