Probablemente ha escuchado un sonido permanente en las últimas semanas, tanto de día como de noche. Un canto perenne que solo tiene un responsable: las chicharras o cigarras que aparecen cuando la cuaresma o Semana Santa se acercan, en El Salvador.

¿Pero qué son estos insectos tan característicos de la temporada? El encargado del programa de Bosques y Biodiversidad del Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada (Cesta), Rafael Vela, explicó que son insectos cuyo cuerpo están divididos en tres regiones: cabeza, tórax y abdómen. Tienen tres pares de patas, un par de antenas y alas.

En El Salvador predomina un tipo de cigarra: la Quesada gigas, de la familia Cicadidae, indica Vela. Parte del ciclo de vida de la cigarra es cuando la ninfa, sale de la tierra, se convierte en cigarra y busca reproducirse. Esto ocurre entre la última semana de marzo y la primera de abril y su proceso de reproducción dura entre cuatro a cinco semanas.

Uno de los datos más curiosos de estos insectos es que tienen el ciclo de vida más largos de todos los conocidos, entre 13 a 17 años, según Vela.

¿Cómo se reproducen?

Vela explica que la cigarra hembra deposita unos 300 huevos en materia orgánica, al eclosionar, las ninfas excavan con sus patas y penetran el suelo, donde se alimentan de raíces ahí pueden durar entre 13 a 17 años como parte de su ciclo biológico bajo tierra, mientras comen y crecen.

“Cuando la ninfa completa su desarrollo, ella abandona las raíces de las plantas y suben al tronco de árboles en donde hace su metamorfosis después de un tiempo de estar inmóviles de ninfa a cigarra”, explica Vela.

¿De dónde sale el canto de las chicharras?

De su abdómen. De hecho son los machos los que cantan y lo hacen para buscar aparearse. “El sonido se genera a través de unas estructuras que se encuentran en la base del abdomen de los machos, que funcionan como cajas de resonancia las cuales se llenan de aire y se vacían a través de unas membranas al que los entomólogos denominan timbales”, explica Vela.

Diario El Mundo preguntó si estos insectos están en peligro de extinción, debido a que hay zonas donde no se escucha, sin embargo, Vela explicó que actualmente no hay estudios que indiquen que las cigarras o “chicharras” tengan algún tipo de amenaza que las ponga en reisgo.