El Ministerio Público detalló que ambos sujetos alteraban las facturas de los cobros al momento de distribuir los productos lácteos.
Según la fiscalía, la tesorera de la empresa de lácteos se dio cuenta del dinero que hacía falta y que algunos documentos, como facturas, se encontraban alterados con nombres de clientes que no adquirían sus productos.
De esta forma, la tesorera contactó a los supuestos clientes y comprobó que los ahora acusados no entregaban los productos lácteos y que además, se quedaban con el dinero.
Los acusados están siendo señalados por el delito de hurto agravado, informó la Fiscalía a través de sus redes sociales.