El Juzgado de Primera Instancia de San Sebastián, en el departamento de San Vicente, notificó este lunes las órdenes de captura en contra de dos generales de la Fuerza Armada, acusados por la masacre de El Calabozo, ocurrida el 22 de agosto de 1982. Además, notificó la detención contra otros tres militares que ya fallecieron, pero que tuvieron cargos importantes en el periodo de la matanza.

Según el abogado David Morales, de Cristosal, quien ejerce la acusación particular, las órdenes de captura son en contra del general y exministro de la Defensa Nacional, Guillermo García, y del general y exjefe de la Fuerza Aérea de El Salvador, Rafael Bustillo. La notificación del juzgado fue hecha ayer, pero está fechada el 27 de septiembre pasado.

Actualmente, García está hospitalizado luego que la jueza de Dulce Nombre de María, en Chalatenango, ordenara detenerlo por la masacre de cuatro periodistas holandeses, otro crimen ocurrido en el conflicto armado; por otro lado, el general Bustillo es procesado por las masacres de El Mozote y la UCA, pero en ambas goza de libertad bajo medidas.

"Hemos estado luchando para que se haga efectiva la detención provisional, hemos recibido una serie de detenciones, solicitamos una información a la Fiscalía; después de un retraso de varios meses la Fiscalía, finalmente, ha respondido y ha reiterado la orden de detención contra varios altos exoficiales. La orden de detención que gira el tribunal es contra el exgeneral Guillermo García, exministro de la Defensa, y el general Rafael Bustillo, exjefe de la Fuerza Aérea de El Salvador", confirmó Morales, la noche de este lunes.

Además, la orden judicial también es contra el coronel Sigifrido Ochoa Pérez, excomandante del DM2; el coronel Domingo Monterrosa, comandante del Batallón Atlacatl; y Napoleón Alvarado, quien al momento de la masacre era comandante de la Quinta Brigada de Infantería, los tres ya fallecidos.

La acusación particular también requirió la orden de captura para el exjefe del Batallón Belloso, Antonio Méndez, y el exjefe de la Brigada de Artilleria, Adalberto Landaverde, también acusado en el caso de la masacre de El Mozote, pero el juzgado no las libró.

Sin embargo, las órdenes de captura fueron catalogadas como “un precedente positivo”, a pesar que la solicitud de parte de la acusación particular fue hechas hace meses. La solicitud de la Fiscalía General de la República fue hecha en enero de 2022, donde pidió la detención de García, Ochoa Pérez, Alvarado, Flores Lima, Bustillo y Mendoza.

El hecho

La masacre El Calabozo se perpetró durante el operativo militar denominado “Teniente Coronel Mario Azenón Palma” desde el 17 al 25 de agosto de 1982 en los municipios de San Esteban Caterina, San Lorenzo, Santa Clara y otros aledaños.

De acuerdo al informe de la Comisión de la Verdad “De la locura a la esperanza”, dice que existen pruebas “suficientes” que el Batallón Atlacatl, el 22 de agosto de 1982, dio muerte “deliberadamente” a más de 200 civiles, hombres, mujeres y niños, que habían apresado sin resistencia. Dice que las autoridades salvadoreñas han negado el hecho y que a pesar que dijeron haber investigado, no existe rastro de dicha investigación.