El expresidente Salvador Sánchez Cerén y nueve exfuncionarios de la gestión de Mauricio Funes enfrentarán a partir de este lunes 28 de agosto hasta el 1 de septiembre, la audiencia preliminar en el Juzgado Tercero de Instrucción de San Salvador, donde son acusados por los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero y de activos, por supuestamente aceptar sobresueldos.

La audiencia fue programada para las 10:00 de la mañana de este lunes, mientras que mañana, 29 de agosto fue iniciará a las 2:00 de la tarde, y los días 30 y 31 de agosto, y 1 de septiembre será a las 8:30 de la mañana.

A parte del expresidente Sánchez Cerén, en calidad de ausente, también son procesados de forma presente los exfuncionarios: exviceministra de Salud, Violeta Menjívar, a quienes la Fiscalía General de la República les acusa de haberse enriquecido ilícitamente a Menjívar con $177,000 a través los sobresueldos; la exviceministra de Educación, Erlinda Hándal, habría recibido $162,000, el exministro de Hacienda, Carlos Cáceres fue acusado de haber recibido $210,000 adicionales a su salario y el exministro de Trabajo, Calixto Mejía, supuestamente recibió $208,000.

Y de forma ausente también son procesados el exministro de Seguridad, Manuel Melgar; la exviceministra de Medio Ambiente, Lina Pohl; el expresidente de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), José Guillermo López Suárez; y el exministro de Obras Públicas, Gerson Martínez.
Todos los ausentes fueron citados legalmente por medio de edicto judicial publicados en medios de comunicación.

Todos los procesados presentes mantienen medidas sustitutivas a la detención, en el caso de Calixto Mejía, la jueza reiteró que tras vencerse el plazo de la detención provisional de los dos años, se le otorgó la medida sustitutiva del arresto domiciliario, sin embargo, la Dirección de Centros Penales por “problemas administrativo no se ha podido materializar la libertad del procesado”. Ante ello, ordenó la inmediata instalación de brazalete electrónico para el procesado, a fin de dar cumplimiento con la orden de libertad del penal de dónde se encuentra privado de libertad.