Inicialmente, la institución declaró la suspensión de las actividades académicas en la zona costera y el área metropolitana de San Salvador derivado de la alerta naranja en estos territorios. Horas más tarde, extendió la medida a nivel nacional cuando se confirmó la transición de la depresión 19-E a tormenta tropical Pilar.
La suspensión aplica para el 30 y 31 de octubre, con tentativo regreso el miércoles 1 de noviembre. La medida abarca tanto las actividades presenciales como virtuales, del sector público y privado.
En una publicación en redes sociales, la institución señaló que la pausa tiene cobertura desde los grados de educación inicial hasta los niveles superiores, así como para los docentes y personal administrativo.
El sector educativo se encuentra en la recta final para concluir el año lectivo 2023, e incluso varios colegios privados finalizaron las actividades académicas el viernes pasado. En tanto, los centros educativos públicos aún tienen eventos programados para esta semana con los estudiantes, mientras que en las universidades concluyen en diciembre.
Zozobra ante Pilar
Juan Carlos Bidegaín, ministro de Gobernación, anunció que la Dirección de Protección Civil activó este domingo 120 albergues para atender a los posibles damnificados por el paso de la tormenta Pilar, que en conjunto tienen una capacidad para resguardar a 8,000 personas.Protección Civil, además, suspendió la pesca artesanal, industrial y deportiva por el riesgo de arrastre ante el oleaje, así como las actividades de recreación en ríos, playas y lagos, que se podrán reactivar a partir del miércoles según evolucione la tormenta.