Esta fue aprobada con cambios ayer, luego de observaciones del fiscal general, Rodolfo Delgado.
Según la reforma será un solo juez quien autorizará las intervenciones telefónicas, y los autorizados para solicitarlas será el fiscal general y el director del centro de intervenciones. También se estableció que el procurador de derechos humanos deberá delegar personal idóneo y que este verificará que las intervenciones tengan autorización judicial. En el pasado, dijo el fiscal general, se pretendía fiscalizar sobre el sistema de intervención que tenía el Centro.