El diputado Mauricio Ortiz, de Nuevas Ideas, preguntó al director general de Energía, Hidrocarburos y Minas, Daniel Álvarez, cómo garantizará la nueva Ley de Energía Nuclear el uso pacífico en los proyectos nucleares que se realicen en El Salvador.

El funcionario también habló sobre las estrategias de seguridad ante posibles accidentes nucleares.

Álvarez aseguró que El Salvador está adscrito a la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) y que la misma Asamblea Legislativa ha aprobado convenios y tratados respecto al tema años atrás.

“Ustedes también validaron todos los convenios y tratados que hay con respecto a este tema, ya tenemos en temas radiológicos desde hace muchísimos años cuál es la seguridad que se le puede dar a la población con el tema de energía nuclear”, le respondió en la reunión previa a la aprobación del dictamen favorable de la Ley de Energía Nuclear en la Comisión de Tecnología, Turismo e Inversión de la Asamblea Legislativa.

Le dijo al diputado que la misma ley ratifica que es para usos pacíficos.

“No es un tema que vamos a hacer bombas, no hay manera, el material para generar energía nuclear no hay manera de hacer bombas con eso, aunque quisiéramos no se puede”, expresó.

El 30 de agosto de 2018, la Asamblea Legislativa de ese entonces ratificó en todas sus partes el "Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares" adoptado el 20 de septiembre de 2017, de acuerdo con el decreto legislativo respectivo.

También, el 1 de julio de 1968, El Salvador firmó el Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares, y lo ratificó el 11 de julio de 1972; también, firmó el Tratado sobre la Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCEN) el 24 de septiembre de 1996 y lo ratificó el 11 de septiembre de 1998.

Una de las ratificaciones más recientes tiene que ver con las indemnizaciones por daños: el 31 de enero de 2024, la Asamblea Legislativa de El Salvador ratificó la Convención de Viena sobre Responsabilidad por Daños Nucleares que busca que los países emitan normas mínimas para indemnizar a afectados o víctimas de los usos pacíficos de energía nuclear.

Operadores deberán tener planes ante emergencias

La Ley de Energía Nuclear, que podría ser aprobada este martes, ordena a los "operadores" a que tengan planes de preparación y respuesta ante emergencias en las instalaciones nucleares, un Plan Nacional de Emergencia Nuclear; y una Política y una Estrategia Nacional en Materia de Desechos Radiactivos y Combustible Gastado de Energía Nuclear. La ley crearía el Programa Nacional de Inspección y Control de Actividades, Instalaciones y Prácticas Autorizadas.

También, la normativa responsabiliza a los "operadores" en caso de incidentes y/o accidentes nucleares de dar "una compensación" a las víctimas y remediar los daños ambientales generados.

Por daños nucleares, la nueva ley establece una responsabilidad civil mínima de $150 millones, aunque los derechos de indemnización, según el proyecto presentado, se extinguirían en 10 años.

Así mismo, las sanciones por infracciones como negarse a una inspección u operar sin licencia oscilarían desde $10,000 hasta el 10 % del costo final de la instalación nuclear o la revocación de la licencia.

Sobre accidente en Japón: "Ahora es otro estándar"

Sin embargo, el funcionario, al referirse a la seguridad de los proyectos de energía nuclear que el gobierno proyecta realizar en El Salvador, afirmó que en toda América Latina no ha habido ningún incidente en generación de energía nuclear aunque sí "en el tema radiológico", es decir, incidentes que producen radiación sin detonación de un dispositivo nuclear. Explicó que trabajan con la Secretaría de Estado de Estados Unidos en seguridad nuclear.

El presidente de CEL de El Salvador se refirió así al accidente nuclear de Fukushima, en Japón, ocurrido en la central nuclear de Fukushima Daiichi, Japón, el 11 de marzo de 2011. “Fue un evento fortuito que nadie estaba preparado, ahora hay otro estándar, todo eso hace que sea todavía más segura la implementación de este tipo de generación”, aseguró. Ese accidente fue provocado por un terremoto de magnitud 9.0 y un posterior tsunami que causó altas olas que permitieron el ingreso de agua del mar a la central.

En la reciente intervención de El Salvador en la 68a. Conferencia General del Organismo de Energía Atómica, celebrada en Viena, del 16 al 20 de septiembre, el director general de Energía, Daniel Álvarez, aseguró que El Salvador "ha trazado como objetivo promover la utilización de las tecnologías nucleares con fines pacíficos y de no proliferación, en condiciones de seguridad tecnológica y física".