En el 30 aniversario de los Acuerdos de Paz en El Salvador, la coordinadora residente de las Naciones Unidas en El Salvador y Belice, Birgit Gerstenberg, remarcó la importancia de la conservación de la memoria histórica para las generaciones posconflicto, pero a la vez señaló que persiste la necesidad de dar respuesta a las víctimas de graves violaciones a los derechos humanos.

En un pronunciamiento de este 16 de enero, la funcionaria consideró una tarea difícil "recuperar el sentimiento nacional" y la importancia que tuvo el anuncio de paz para la generación de salvadoreños que vivió el conflicto. Sin embargo, señaló la importancia de que las "generaciones posconflicto" conserven la memoria histórica para avanzar "en la consolidación de la paz" y superar desafíos actuales.

A tres décadas de la firma de los Acuerdos de Paz estaremos marcando este año con actividades para subrayar la importancia de continuar afianzando la paz, la democracia y el respeto a los derechos humanos.

Birgit Gerstenberg, coordinadora residente de la ONU en El Salvador y Belice.


Gerstengberg estaba en El Salvador cuando se firmó el acuerdo de paz en Chapultepec, el 16 de enero de 1992.

En el comunicado publicado este domingo sostuvo que dicha firma no implicaba un cambio repentino en el país, sino una oportunidad de construir una nueva realidad democrática en El Salvador en donde se respetara la vida, los derechos humanos y se alcanzara el bienestar para todos. Consideró que el valor de los acuerdos de paz radica en que "puso final a un conflicto cruento" que cobró la vida de 75,000 salvadoreños.

Los objetivos del acuerdo de paz, señaló, requerían "esfuerzos diarios para consolidarlos". Y advirtió que aún persiste la necesidad de dar respuesta a las víctimas de graves violaciones a derechos humanos, en donde una ley de justicia transicional sería el camino.

Especialmente para las generaciones posconflicto, la conservación de la memoria histórica es clave para avanzar en la consolidación de la paz superando las brechas y desafíos que aún quedan y marcan a la sociedad salvadoreña. Birgit Gerstenberg, coordinadora residente de las Naciones Unidas en El Salvador y Belice.

El 30 aniversario de los Acuerdos de Paz estuvo marcado por una discusión entre el Gobierno y críticos sobre la necesidad de una conmemoración.

Los movimientos sociales convocaron a una marcha que tuvo como obstáculo retenes policiales que pidieron regresarse a los motoristas que conducían a varios manifestantes del interior del país.

Diferentes líderes sociales y organizaciones internacionales que respaldaron el proceso de paz en El Salvador se pronunciaron por no olvidar la memoria histórica, mientras el Gobierno se pronunció por hacerle honor a las víctimas de la guerra y no a los firmantes de los Acuerdos de Paz.