En su reclamo, las mujeres reiteraron su petición a la Asamblea Legislativa para que ratifiquen el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el cual, es un convenio sobre las trabajadoras y trabajadores domésticos aprobado en el año 2011, que obligaría al Estado a establecer un salario mínimo para el sector.
La denuncia fue hecha en la celebración de los 10 años de organización del sindicato.
La secretaria general del SIMUTHRES, Erica Regalado, dijo que se sienten orgullosas de tener 10 años de organización, sin embargo, no han logrado ser escuchadas por los gobiernos.
“Hoy celebramos 10 años de estar legalmente organizadas como sindicato en la lucha por la defensa de nuestros derechos laborales, lamentablemente, ninguna de nuestras demandas se han logrado. Pedimos a la Asamblea Legislativa que ratifique el Convenio 189 de la OIT que contiene una serie de condiciones para dignificar nuestro trabajo, además, que se establezca un salario mínimo, porque nosotras por estar prácticamente en la informalidad el empleados paga en la zona rural de $100 a $150 mensuales y en la zona urbana de $150 a $200 mensuales”, detalló Regalado.
La trabajadora del hogar dijo que con esos salarios no alcanzan a cubrir la canasta básica, tampoco tienen acceso a préstamos y además con este tipo de trabajo no tienen Seguro Social.
“Nosotras no tenemos seguro social, tampoco hay pensión para ya cuando no podemos trabajar por la edad, tampoco nos dan indemnización, queda a discreción del empleador, a eso le podemos sumar tantos casos de malos tratos y de acoso sexual que muchas han sufrido”.
Erica Regalado,
Líder de SIMUTHRES.
Actualmente dijo que la cifra de mujeres trabajadoras del hogar remuneradas llega a unas 170,000 a nivel nacional.
Margarita Ventura, trabajadora del hogar remunerada, es emprendedora y lleva las comunicaciones del SIMUTHRES, dijo que el sindicato cuenta con 250 afiliadas.
“Nosotras no podemos quedarnos solo con lo que recibimos como trabajadoras del hogar, por eso muchas somos emprendedoras, porque no nos alcanza para cubrir los gastos de nuestros hijos, de nuestras familias, por lo que aprovechamos cuando hay eventos para promover nuestra venta”, explicó Ventura, quien además de ser trabajadora del hogar (desde los diez años de edad) es actriz de teatro.
En el evento del Sindicato estuvo presente la diputada Claudia Ortiz del partido Vamos, quien también hizo un llamado a la bancada mayoritaria en la Asamblea Legislativa a escuchar las demandas de este sector que vive con muchas carencias sociales y laborales.
“Son trabajadoras que viven con más vulnerabilidad y ellas están pidiendo que se les trate con los mismos derechos que tienen todos los trabajadores: contratos, horarios establecidos, prestaciones sociales, salario mínimo, todo esto es de derecho, es por justicia. En la Asamblea Legislativa hemos estado presionando para que se ratifique el Convenio 189 de la OIT que establece obligaciones para el Estado en materia de trabajo doméstico y también la aprobación de una Ley de trabajo doméstico”, dijo Ortiz.
Sin embargo, la iniciativa de la diputada de la Ley de Trabajo Doméstico ni siquiera ha sido agendada en comisión, en la Asamblea Legislativa.
“Y ese es un grave error de los que tienen el poder. Dicen que son mayoría, en la Asamblea, pero realmente tienen la minoría, porque la mayoría es esta gente, esta gente organizada, son las mujeres que se levantan todos los días para trabajar en una casa, que no ven a su familia por una semana, o un mes, la gente de las maquilas, la gente que vende en las calles, esa gente es la mayoría y para ellos tenemos que legislar”, aseveró la diputada.