El vicepresidente de la República, Félix Ulloa, reiteró a un medio de comunicación chileno que el estado de excepción en El Salvador se mantendrá mientras persistan las condiciones que lo generan y que servirá más a procesos penales que a operativos militares, ya que las maras “ya no dominan” ningún territorio.

“No vamos a volver a un estado de normalidad, porque estamos en normalidad. El control territorial y las escuchas se van a eliminar cuando los jueces y fiscales estimen que no hay necesidad de ello”, respondió el vicegobernante a la pregunta sobre si no se considera un tiempo para volver a la normalidad.

En la entrevista, realizada y publicada este 9 de febrero por el diario La Segunda, Ulloa detalló que “no es un clamor popular” levantar el régimen de excepción y que este solo afecta a personas detenidas y procesadas.

Hasta enero el gobierno reporta 62,975 supuestos pandilleros detenidos bajo el régimen de excepción, que implica la suspensión de tres garantías constitucionales. Mientras, las organizaciones han recibido 4,564 denuncias de detenciones arbitrarias, acoso, amenazas y lesiones por parte de cuerpos de seguridad desde marzo de 2022.

Faltan capturas de cabecillas.

Pese a que el vicegobernante aseguró que si se mantiene el estado de excepción “no es para los operativos militares sino para los procesos judiciales”, también aclaró que aún les falta capturar a cabecillas.

“Falta golpear a las estructuras superiores”, dijo, sobre cabecillas de la Mara Salvatrucha que aún no han arrestado. “Hasta ahora gran parte de los detenidos son de rangos menores”, explicó a La Segunda.

Ulloa detalló que se construirán más módulos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo para “tener posibilidad de detención” a todos los procesados y que tengan sus audiencias.

Según el vicepresidente, la pena mínima de condena es “30 años” y a ello se les podrá acumular penas por otros delitos, por lo cual prevén que realicen actividades productivas en la misma cárcel.

¿Rehabilitación?

Durante la entrevista, Ulloa no rechazó la posibilidad de rehabilitación de jóvenes pandilleros y esta fue identificada como parte de una legislación “muy progresista” de El Salvador y como “parte de la legislación penitenciaria” cuyas decisiones son tomadas por los jueces. “Es una segunda oportunidad que da la sociedad a alguien que ha cometido un ilícito”, dijo.

El régimen de excepción fue aprobado el 27 de marzo de 2022 luego de una matanza de 62 salvadoreños solo el domingo 26 de marzo y su décima prórroga, que pueden realizarse por un máximo de 30 días, está vigente hasta el 15 de febrero de 2023.

Régimen de excepción: El Salvador

Hoy se cumplen 321 días de régimen de excepción. Este suspende tres derechos de la Constitución.

1.- Información sobre detención
El régimen suspende el derecho de la persona a ser informada de sus derechos y razones de detención (inciso 2 artículo 12).

2.- Periodo máximo de detención
Suspende el periodo máximo de 72 horas de detención sin audiencia judicial. El máximo en régimen es 15 días (inc. 2 art. 13).

3.- Escuchas sin orden judicial
Suspende el derecho a no ser intervenido en las comunicaciones sin una orden judicial (artículo 24 de la Constitución).