El Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) señaló que el Presupuesto de la Nación 2023 tiene partidas que no tienen una fuente de financiamiento definidas, por lo que no descarta que el gobierno recurra a endeudamiento interno para poder cubrirlas.
“Lo que hemos detectado con el presupuesto aprobado es que hay recursos que el gobierno no tiene todavía garantizado de dónde los va a obtener, particularmente son $667 millones que en el presupuesto aprobado quedaron como otros empréstitos”, dijo Ricardo Castaneda, coordinador de país de Icefi.
Agregó que ante las dificultades de un financiamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) el gobierno tendrá que encontrar otras alternativas, “y una alternativa puede ser utilizar los certificados de transición previsional (CTP)”, dijo.
Estos certificados estarían a cargo del Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP) de acuerdo a la reforma aprobada el año pasado.
El informe de “Análisis de la Ley del Presupuesto General del Estado para el Ejercicio Financiero Fiscal 2023 de El Salvador y su comparación con el presupuesto ejecutado en 2022” también destaca que hay partidas subestimadas, como la de devolución de impuestos, que para este año tiene programado $500,000, cuando en 2022 se devolvieron $155 millones. “¿Qué es lo que le toca en la práctica, o recurrir a más deuda o recortar otros programas”, dijo.
