El empresario y salvadoreño de la diáspora en Estados Unidos, Joel Sánchez, aseveró que no se arrepiente de haber sido candidato a la presidencia por Alianza Republicana Nacionalista (Arena) en las elecciones 2024, tras el listado de acusaciones hechas por el presidente del Consejo Ejecutivo Nacional (Coena) del partido tricolor, Carlos García Saade.
“Más que el candidato de Arena, yo sentí que era el candidato de muchos sectores sociales, no hay que olvidar que de ahí salí, fui una propuesta para el partido Arena. El partido Arena me da la oportunidad de que pueda y yo no era un correligionario. No me arrepiento, porque lo hice de corazón, lo hice de buena voluntad como un salvadoreño de la diáspora que regresa a su país y busca la presidencia para el bienestar de todos los salvadoreños, en ese sentido no me arrepiento”, expresó Sánchez a Diario EL MUNDO.
El viernes en conferencia de prensa, García Saade anunció que pondría un aviso en la Fiscalía General de la República contra Sánchez por posible lavado de dinero, por no haber rendido cuentas al partido del financiamiento de su campaña; en la misma conversación con EL MUNDO, Sánchez afirmó que financió su campaña con sus ahorros y que, si no usó las cuentas del partido, fue por la misma recomendación de García Saade, pues las cuentas de Arena están intervenidas por un proceso de extinción de dominio.
El empresario en el exterior aseguró que el comportamiento del presidente del Coena- a su parecer, "se encuentra abatido por su mismo partido", a quien deseó que salga del instituto político para que este "continúe vivo".
En la conversación que Sánchez tuvo con Diario EL MUNDO explicó que las actuaciones de García Saade son contradictorias y no se debe dejar de lado que cuando Arena lo aceptó como su candidato, el partido estaba quebrado y que además utilizó la derrota electoral para culparlo a él.
“No hay que olvidar que en tiempos de la campaña cuando se terminaron las elecciones pues también salió a acusarme de traición, salió a acusarme del deslealtad, de corrupción en los medios de televisión para justificar la pérdida de la elección, y que solamente obtuvimos un tercer lugar entonces él ya tiene la costumbre de andarse colgando de mí para justificar”, aseveró.
Para Sánchez esa acusación solo puede obedecer a la desesperación de García Saade para desviar la atención, por los malos manejos hechos con los fondos del partido. El excandidato presidencial calificó esta acusación de una "cortina de humo" para cambiar la atención de los problemas internos del partido.
El empresario salvadoreño radicado en Estados Unidos señaló que uno de los orígenes del problema es que cuando los excandidatos que participaron en la última elección han pedido transparencia con los fondos del partido tricolor "él (García Saade) se enoja" y recriminó que después lo han visto con una vida "suntuosa".
Recordó que durante la campaña presidencial, García Saade le pidió $2,500 mensuales para gastos personales, y que él le dio.
Sánchez también puso en tela de juicio que si García Saade sabía de un cometimiento de delito en la campaña presidencial pasada por qué esperó un año para señalarlo. "Anda buscando un chivo expiatorio", agregó.