El expresidente Mauricio Funes fue el que más destinó fondos con al menos $334 millones para la llamada "partida secreta", seguida de la gestión de Antonio Saca, Francisco Flores y Salvador Sánchez Cerén, respecto a los fondos que eran clasificados como "objeto presupuestario 54315". El informe de Cristosal incluye la gestión del presidente Bukele, señalando que ha destinado en los últimos cinco años más de $132 millones para el Organismo de Inteligencia del Estado (OIE) en gastos reservados.
En enero de 2017, Diario El Mundo publicó que la sumatoria de gastos reservados, conocida popularmente como "partida secreta", reportada por el Ministerio de Hacienda ante una solicitud de información pública sumaba $966.9 millones desde 1995 hasta 2016.
Gastos reservados de Presidencia o en inteligencia según Cristosal:
- Armando Calderón Sol: $67.16 millones.
- Francisco Flores: $157.12.
- Antonio Saca: $311.94.
- Mauricio Funes: $334.94 millones.
- Salvador Sánchez Cerén: $155.55 millones.
- Nayib Bukele (gastos reservados en Organismo de Inteligencia del Estado): $132.4 millones.
El presidente Armando Calderón Sol tuvo un gasto de esta partida secreta de $67.16 millones, siendo 1998 el año en el que más gastos realizó con $15.19 millones convirtiéndose en el mandatario salvadoreño con menor monto en este rubro.
Luego, el expresidente Francisco Flores gastó $157.12 millones en partida secreta, representando un aumento del 134 % respecto al gasto de Calderón Sol. El año en que Flores gastó más en este aspecto fue 2004 con $37.59 millones.
Por su parte, el expresidente Antonio Saca gastó $311.94 millones en la partida secreta desde 2005 hasta 2009, según los datos recopilados por Cristosal en su informe. El año con mayor gasto fue 2008 con un presupuesto de $67.76 millones. De $157 millones de Flores se pasó a $311 millones de Saca, lo cual, representa un aumento del 99 %.
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Por su parte, el exmandatario salvadoreño Mauricio Funes elevó el gasto de la partida a $334.94 millones de acuerdo a los datos de Cristosal, siendo el 2013 cuando más fondos destinó con $81.67 millones. El gasto en comparación con los $311 que usó Saca se elevó en un 7 %.
El último mandatario que hizo uso de la partida secreta con ese nombre fue Salvador Sánchez Cerén, quien redujo su uso en comparación con su antecesor en un 54 %. Sánchez Cerén usó $155.55 millones para partida secreta según los datos recopilados por Cristosal.
En el mandato de Calderón Sol se usaron $67.16 millones versus los $155.55 millones de Sánchez Cerén, entre ambos datos hubo una variación del 132 %. En total, los cinco gobernantes usaron $1,206.71 millones en la partida secreta.
En el informe, Cristosal detalla que, si bien el gobierno del presidente Nayib Bukele no ha usado la partida de gastos reservados, tiene gastos similares como los gastos del Organismo de Inteligencia del Estado (OIE), donde reporta $132,490,800. El año con mayor gasto fue 2023, según Cristosal, pues se destinaron $33.5 millones, y 2019, con $30.8 millones; y el año con menor asignación fue 2020 con $17.5 millones.
Los gastos en partida secreta son uno de los diez patrones que Cristosal ha expuesto como patrones de corrupción. La organización ha criticado que la Corte de Cuentas de la República (CCR) no auditó los gastos reservados demostrando "ser incapaz de identificar malas prácticas y de señalar actos de corrupción".