El pasado 9 de octubre, 82 convencionistas del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) votaron en contra de la reforma de los estatutos de su partido: no estuvieron de acuerdo y así lo expresaron en la votación.

Uno de ellos fue el actual concejal soyapaneco Cayetano Cruz. Durante la convención, quiso explicar cuál era su inconformidad pese a que algunos de sus compañeros, recuerda, lo llamaron traidor.

“Señalo el tema de la proporcionalidad, la forma de tomar decisiones, se me fue bastante gente encima y desafortunadamente se me apaga el micrófono y ya no se me permite intervenir”, cuenta, en una entrevista a El Mundo.

El secretario de comunicaciones y miembro de la Comisión Política del FMLN, Juan José Ángel, aseveró que la participación de cada convencionista tenía un límite de 5 minutos. Calcula que participaron 20 convencionistas en todo el debate. Pero, según Cruz, él advirtió tres convencionistas que se quedaron sin manifestar su opinión.

A lo que no debemos llegar es que en el partido se censuren los espacios donde debe haber debate. Creo que la militancia debe darse cuenta”. Cayetano Cruz, convencionista del FMLN

Un número fijo por territorio.

De un total de 336 votos registrados para la aprobación de los estatutos del FMLN, hubo 240 votos a favor, 82 votos en contra y 14 abstenciones: un 71.4 % a favor, 24.4 % en contra y 5.8 % de abstenciones.

Uno de los cambios objetados fue la nueva regla de representación territorial en la Convención Nacional, que es el máximo órgano de dirección del partido político de izquierda. Esta dejará de tener representación proporcional a la población de militantes de cada municipio para tener únicamente 10 delegados por cada departamento.

Discusión preliminar de los estatutos en la zona paracentral, el 17 de septiembre. / Cortesía FMLN.
Discusión preliminar de los estatutos en la zona paracentral, el 17 de septiembre. / Cortesía FMLN.



En los nuevos estatutos, la Convención Nacional mantiene el delegado de cada municipio –los secretarios municipales–, los integrantes del Consejo Nacional, funcionarios como presidente si es miembro, alcaldes, diputados y también representantes de militantes del exterior.

Sin embargo, en los nuevos estatutos suprime la disposición que le ordena designar a “un número de delegados y delegadas de cada municipio en proporción a la cantidad de miembros que concurran a votar en la respectiva elección”, dejando el número fijo de 10 delegados por departamento y los ya incluidos secretarios municipales.

Se pasó a consultar departamento por departamento en Asamblea donde participaban no solo convencionistas, se amplió a estructuras municipales”. Juan José Ángel, miembro de la Comisión Política

Controversia.

El secretario de comunicaciones del FMLN, Juan José Ángel, reconoció el cambio en los estatutos. “No sé si llamarle afectación”, dijo. La regla derogada fue que por cada 50 afiliados al FMLN del municipio se delegaba un convencionista.

El dirigente explicó que hay municipios pequeños en los cuales no hay 50 personas afiliadas al FMLN, por lo que se decidió mantener el secretario municipal y aumentar 10 representantes por departamento. “Sí, se modificó lo de los 50 militantes, eso es correcto, pero en términos globales, ya como todo el país, se está diversificando, que todos los departamentos tengan mayor cantidad de delegados, se distribuye más la representatividad”, afirmó.

Para el convencionista Cayetano Cruz no es así. “¿Adónde queda la proporcionalidad y representatividad?, ¿o sea ese principio, que es tan importante en cualquier democracia?”, cuestionó.

Para explicarlo, Cruz pone un ejemplo: en su municipio, Soyapango, hay 518 afiliados con 9 convencionistas, una cantidad proporcional a la población del municipio. “Ahora solo se va a elegir un convencionista por municipio. Morazán tendría 26 convencionistas y San Salvador tendría 19 convencionistas cuando la diferencia de afiliados y población es abismal. No puedo decirle que un convencionista en Soyapango va a representar a esos cientos”, observó.

Cruz aseguró que al intentar explicar sus inconformidades en la Convención, lo bajaron de la tarima y “hubo gente que recurrió al insulto”. Cruz tiene dudas, incluso, en el resultado de la votación.