Sin embargo, asegura que será positivo “siempre y cuando sus bases económicas se desarrollen a la luz de un plan económico estratégico de gestión pública”.
El análisis explica que “debido a que se acerca un periodo electoral” las decisiones “de variables reales pueden verse influenciadas por decisiones de gestión política” y con ello “afectar el cumplimiento de metas de desarrollo”.
Baja ejecución.
El informe, además, señala que la inversión pública programada para 2022 se ha ejecutado en un 21.9 % a agosto de 2022, es decir, tiene un déficit de 78.1 %, dato que destaca porque sostiene que las estimaciones macroeconómicas del presupuesto 2023 deben ser reales. En el gobierno central la ejecución alcanza el 25.3 % de lo programado modificado.La Escuela de Economía sostiene que el presupuesto incluye $990.1 millones de inversión pública, 89.5 % del cual es de arrastre o inversión que no se ha realizado durante el ejercicio fiscal presente.