Dijo: “No es cierto que la situación de prensa sea normal. En los últimos dos años y medio, El Salvador ha tenido un rápido deterioro de la libertad de prensa y la libertad de expresión”.
En 2021, el centro de monitoreo de agresiones a periodistas de la APES reportó 219 casos. Castro señaló que el discurso estigmatizante se ha traducido en agresiones físicas a periodistas.
“Es muy significativo que cuando hablamos de esto se diga ‘es que en El Salvador no matan periodistas. Pareciera que tenemos que dar gracias de que no nos estén asesinando”, lamentó.
En lo que va de 2022, se registran 11 ataques, incluyendo hackeos a cuentas de WhatsApp.
“Lo que antes eran ataques únicamente de Casa Presidencial, desde mayo del año pasado se pueden describir como ataques cometidos, perpetrados por el Estado en su conjunto”, expuso.
El presidente de APES recordó que en enero de 2022 se presentaron avisos a la Fiscalía General de la República sobre los hackeos en WhatsApp y el espionaje a 31 periodistas con el programa Pegasus.