El ministro de Trabajo, Rolando Castro, negó este jueves que haya despidos injustificados en las alcaldías municipales y únicamente aseveró que hay empleados que han sido separados de cargos de confianza en las municipalidades.

En la celebración del Día del Sindicalista Salvadoreño, el funcionario dijo que la clase trabajadora no tiene por qué temer a despidos del gobierno.

"No tiene por qué haber temor. Vuelvo a repetir que en un país democrático debe de haber libertad de expresión, libertad de organización, libertad de movilización; el sindicalismo debe de estar vigente así como estuvo ayer, hoy, mañana y siempre", aseguró el titular de trabajo.

Se le consultó si tiene un registro de despedidos luego de denuncias de 300 despedidos por la Federación Sindical de Trabajadores Municipales de El Salvador (Fesitrames). Castro respondió que podía garantizar que se han respetado los derechos de la "gran mayoría" de trabajadores municipales.

"A los trabajadores municipales, hoy es cuando más se les ha garantizado el derecho a la estabilidad laboral, lo que sí sabemos que ha habido, que ya están definidos por la ley, como cargos de confianza, han sido separados por los nuevos gobiernos que han llegado. Pero en términos generales, en las personas que están por Ley Administrativa Municipal, podría garantizar que la gran mayoría se ha respetado el derecho a la estabilidad laboral", defendió Castro.

El funcionario ignoró una pregunta sobre denuncias de despidos en otras instituciones gubernamentales.
Hasta el 27 de octubre, sindicalistas registraban más de 70 despidos, 12 contra maestros, cuatro de ellos asistieron a la marcha blanca del 19 de octubre.

La declaración del funcionario fueron en el marco de la celebración del Día del Sindicalista Salvadoreño en donde se reunió con sindicatos que le entregaron un pronunciamiento con seis peticiones que él se comprometió a entregarle al presidente de la República, Nayib Bukele.

"El sindicalismo es un eje transversal, para la construcción de una democracia y para crecer económicamente. La clase trabajadora es el sector más fuerte, pujante, para ser un país productivo y en crecimiento económico, por lo tanto el movimiento sindical no debe tener ningún tipo de temor de cualquier tipo de acción", indicó.



Al final del evento varios miembros de los sindicatos a fines al gobierno aprovecharon para tomarse fotografías y estrecharle la mano al ministro de Trabajo.

Luego de la marcha blanca del 19 de octubre, fueron separados de sus cargos públicos una sindicalista de Salud, uno del Hospital Nacional Rosales, dos del Ministerio de Hacienda y cuatro directivos sindicales del Instituto Salvadoreño de Bienestar Magisterial (ISBM). Antes de la marcha del 19 de octubre, el Movimiento de Trabajadores Despedidos (MTD) contabilizaba 209 despidos de sindicalistas desde 2019.