La militancia del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) debe elegir este domingo a sus nuevos dirigentes a través de elecciones internas con voto libre, igualitario y secreto de las bases según indica la Ley de Partidos Políticos.

La dirección del partido se la disputan Simón Paz, concejal de San Salvador Centro, y Manuel "El Chino" Flores, excandidato presidencial del instituto político de izquierda.

Simón Paz es egresado de la licenciatura en Ciencias Jurídicas de la Universidad de El Salvador (UES), fue diputado suplente en la Asamblea Legislativa en el período 2012-2015 y fue alcalde de Mejicanos desde 2015 hasta 2021, cuando perdió ante Saúl Meléndez, de Nuevas Ideas.

Durante una entrevista con Diario El Mundo, Simón Paz asegura que hay que realizar trabajo de territorio para retomar la confianza de los militantes, además de convertirse en un partido propositivo. Paz descarta que haya división en el FMLN, aunque asevera que la nueva dirigencia debe trabajar por la unión en el instituto.

–¿Cuál debe ser el estilo dirección del FMLN como nuevo partido de oposición?

Yo creo que, y lo he sostenido estos días que he andado visitando diferentes municipios del país, uno de mis planteamientos concretos es que los que queden al frente del organismo de conducción del partido deben tener una característica, que es precisamente ir al trabajo de territorio, es de ir a trabajar con la militancia, pero allá en el territorio, generar espacios de discusión, construir propuestas en conjunto para construir una estrategia que nos permita avanzar y consolidarnos como FMLN en este esfuerzo en el que estamos, entonces, yo considero que es una condición primordial que debe tener esta dirigencia.

Es volver a nuestros principios que es ir a nuestra militancia allá en el territorio y definitivamente hacer eco en una práctica concreta de las propuestas de la militancia, eso por un lado, pero por otro debemos ser propositivos. Nosotros, a la par de que seamos deliberantes, a la par de que se denuncien situaciones que no van acorde a las necesidades de este pueblo, debemos ser propositivos también, que son dos preceptos que yo he ido planteando aparte de irle generando espacio a la juventud, aparte de generarle espacio a la mujer, al adulto mayor, a nuestros veteranos y consolidar o fortalecer las alianzas con los diferentes sectores progresistas de este país.

–¿Cuáles son los obstáculos que enfrenta el FMLN en el nuevo ecosistema político salvadoreño, una oposición reducida al mínimo en toda la historia?

Tenemos una militancia, acuérdese que el FMLN es un partido con tradición, el FMLN es un partido que tiene sus raíces profundas en este pueblo, entonces, a pesar de que no tenemos representación como alcaldes o alcaldesas ni en la Asamblea Legislativa, pero sí tenemos militancia, entonces, por eso yo planteo que hay que ir al encuentro de esta militancia en el territorio, generarle confianza a nuestra militancia, porque dejéme decirle que buena parte de compañeros lo que han hecho es apartarse porque no hemos tenido una dirección que trabaje bajo una estrategia y no es que se hayan pasado a otro partido, sino que lo que han hecho es hacerse a un lado. Claro, hay casos excepcionales que ya los conocemos, sin embargo, yo considero que esta militancia que sigue siendo del FMLN, pero que optó por apartarse, hay que generarle confianza para atraerlos nuevamente a este partido porque la fortaleza que debemos tener es fortalecer un FMLN, empezando allá con la gente, con las bases.

–Mucha gente dice que el FMLN los decepcionó. ¿Cree que las ideas del FMLN no funcionaron o nunca fueron ejecutadas?

La verdad es que hay como varias situaciones que generan esa percepción de la gente y le voy a mencionar dos situaciones fundamentales: uno es que, como el FMLN, como todo instituto político también, se han cometido errores y eso no lo podemos pasar desapercibido, se han cometido errores, pero también parte de la situación es la tremenda campaña de odio que este régimen implementó contra el FMLN con el objetivo específico de hacerlo desaparecer porque el FMLN es el único partido de izquierda en este país y es el único partido que va a seguir denunciando las atrocidades que este régimen está cometiendo contra este pueblo salvadoreño.

Se cometieron errores pero eso no implica que el instrumento como tal esté terminado, esté caduco. Los errores los cometemos los militantes, sin embargo, todavía hay una expectativa en nuestra militancia de sacar adelante al FMLN y lo digo con conocimiento de causa, hoy que he andado recorriendo los municipios me he dado cuenta de cómo la militancia a pesar de que ha sido abandonada por la dirección del partido, a pesar de que no ha habido una estrategia, la militancia ahí está y está dispuesta a seguir adelante.

–¿Hay división dentro del FMLN en torno al gobierno de Bukele?

Yo creo que divisiones no pueden haber, habrá diferentes ópticas de ver la situación, sin embargo, una de las tareas fundamentales es cohesionar este partido, unirlo, que es una tarea primordial que debemos tener en mente para seguir fortaleciéndonos y yo creo que divisiones, como la palabra lo dice no hay, sino que hay diferentes ópticas de ver la realidad.

Pero lo importante es que todo conlleve a que este partido FMLN continúe su lucha y yo lo he dicho a los compañeros en los diferentes municipios de que la tarea del FMLN no es una tarea a la vuelta de la esquina, es una tarea que va más allá, si no, no nos estamos preparando ni nos vamos a fortalecer para un evento electoral, sino que nos vamos a fortalecer para seguir trabajando en la búsqueda o en la construcción de una sociedad justa en el país y eso tampoco está a la vuelta de la esquina.

–¿Qué piensa de las denuncias de irregularidades en las elecciones internas del FMLN?

Yo creo que en nuestro partido no deberían de estarse dando ese tipo de irregularidades, nosotros hemos sido críticos del papel del Tribunal Supremo Electoral en las recién pasadas elecciones y es inconcebible de que a estas alturas se estén dando ese tipo de arbitrariedades. No pueden ni deben de hacerse, nosotros debemos caracterizarnos por ser transparentes y, si estamos criticando el régimen en materia de transparencia, nosotros debemos dar el ejemplo, pero los casos que señalan es un poco complicado porque denota de que no somos coherentes. La Comisión Especial Electoral no es coherente como debe ser y eso complica más las situaciones.

Sin embargo, el proceso concluye el 14 (de julio) y lo que menos espero es que esos señalamientos se tomen en cuenta y, si bien estamos ahora, pero hay que tomar en cuenta para darle respuesta a esas situaciones y que no se vuelvan a dar.


–¿Hay democracia en El Salvador?, ¿en qué fase estamos?

Yo creo que la democracia es algo que se ha venido deteriorando prácticamente en estos cinco años que Nuevas Ideas ha estado al frente de este país y cuando digo eso es porque la constante violación a los derechos humanos denota que la democracia poco interesa en este país y le digo eso por la cantidad de medidas, por la cantidad de acciones que han tomado, tenemos a la base un régimen de excepción que lleva más de dos años de estar instituido y ya no es la excepción, es la regla, pero eso también conlleva a tremendas violaciones de derechos humanos, hay cantidad de personas detenidas inocentes.

El delincuente debe estar purgando su pena y eso la ley lo reconoce, tenemos el Código Penal que estipula la sanción que le van a imponer al ciudadano que violente estos estamentos legales y el delincuente debe estar preso, debe estar cumpliendo su condena.

Sin embargo, con el régimen de excepción y lo hemos visto en la práctica concreta, que a la hora de que en casi dos años y medio sale gente de las cárceles y le dicen 'lo hemos dejado libre' porque es inocente, pero ¿cuánto ha sufrido esta gente al interior de los penales?, en donde no se le permiten las visitas, donde no se sabe si el paquete le llega, entonces, todo eso es una constante violación a los derechos humanos, pero también conlleva la cantidad de reformas que se han hecho, reformas que no vienen a beneficiar este país, sino que son reformas que llevan un objetivo de perdurarse en el poder y lo más grave es la violación a la Constitución en el tema de la reelección porque por muchos artículos escondidos que busquen en la Constitución, en nuestro país está prohibida la reelección y es tácito cuando dice eso, sin embargo, hubo reelección pero, para llegar a eso, hubo toda una estrategia de controlar todo el aparato estatal y ponerlo en función de esto.

Hemos llegado a los extremos de que el presidente se atribuye funciones que no le competen, sino que a veces le competen a otra institución como el Órgano Judicial, el tema de los despidos, no hay una descentralización de poderes en este Estado y, cuando hay una centralización de poderes es donde la democracia se pierde, ahora no tenemos democracia, el Órgano Judicial no tiene autonomía.

A este país lo han llevado a uno de los abismos más tremendos políticamente hablando en la historia de este país en donde en cinco años no hubo políticas económicas que vinieran a enfrentar la situación del país y, el primero de junio, lo dijo 'en estos cinco años, vamos a ver el tema económico'. ¿Y en los cinco años atrás?, aquí están los resultados de haber descuidado uno de los pilares fundamentales de la economía de nuestro país: el sector agrícola, que es uno de los que genera, que es el que produce, pero hemos llegado al extremo de que dependemos de otros países en el tema de verduras por poner un ejemplo.

Hemos llegado al extremo de que el presidente amenaza a los vendedores con el régimen si no le bajan a los productos, como que si fueran los vendedores los que producen las verduras; y nosotros no estamos produciendo, estamos produciendo en pequeñísimas cantidades, pero eso es esfuerzo no porque el gobierno esté apoyando con un programa en el tema agrícola.