OpenAI eliminó una función de ChatGPT que permitía a los usuarios hacer visibles sus conversaciones indexadas en motores de búsqueda como Google, tras comprobarse que, al publicarse estos ‘chats’, se estaba compartiendo información personal sensible inadvertidamente.

Harta ahora, los usuarios del chatbot disponían de una opción con la que, al seleccionar una conversación, podían marcar una casilla para que se dicho chat se compartiera con los motores de búsqueda. Se trataba de una herramienta ideada como un "experimento breve" para ayudar a las personas a descubrir conversaciones útiles.

Sin embargo, la empresa dirigida por Sam Altman decidió eliminar esta función, ya que considera que genera "demasiadas oportunidades para que la gente comparta información no deseada sin querer", según argumentó el director de Seguridad de la Información de OpenAI, Dane Stuckey, en una publicación en X.

Stuckey también señala que la compañía está trabajando para eliminar el contenido indexado de los buscadores relevantes, y ha anunciado que el cambio se llevará a cabo a partir de este viernes. "La seguridad y la privacidad son primordiales para nosotros y seguiremos trabajando para reflejarlas al máximo en nuestros productos y funciones", ha sentenciado.

En concreto, esta función permite que, si se filtraban los resultados de Google, Bing u otros motores de búsqueda para incluir sólo el dominio "https://chatgpt.com/share", se podían encontrar conversaciones de otros usuarios con ChatGPT, tal y como ha apuntado TechCrunch.

En estos casos, se descubrió conversaciones de todo tipo, desde gente que pide ayuda para renovar el baño hasta solicitudes para rescribir el currículum para aplicar a un empleo concreto. No obstante, la conversación sólo se añadía en el caso de que el usuario hiciera clic en la opción de compartir, de su propio chat, y luego dándole a "crear enlace", por lo que no se producía de forma automática por parte del chatbot.

Estos usuarios no eran conscientes que, al hacer esto, el enlace creado se indexaba a motores de búsqueda, y otras personas podían tener acceso a conversaciones que desvelaban información personal que no se quería hacer pública.