El estadio Cuscatlán se encuentra en un proceso de reparación en donde, principalmente, la grama del coloso de Monserrat está siendo trabajada para estar listo para el Apertura 2017. Se ha aprovechado ahora mismo a hacerlo ya que no hay partidos de liga de la primera división.
El trabajo sobre el engramillado consiste en mejorar la absorción de agua al momento de enfrentar las lluvias, según informa EDESSA, dueña del recinto deportivo.
Estos trabajos se vienen haciendo desde el 22 de mayo en donde ha habido mayor atención en restaurar el drenaje de la cancha principal. Precisamente, estas reparaciones fueron el principal motivo por el que juego por el ascenso entre Audaz e Independiente no se realizó en el Cuscatlán. Al final, dicho encuentro se realizó en el estadio de la Universidad de El Salvador.
En medio de esta situación, Gino Rullo, representante de la CONCACAF, llegó el día miércoles en la tarde para dar el aval definitivo para que, tanto Alianza como Águila, puedan usar el estadio para realizar sus partidos respectivos de la Liga de Campeones de CONCACAF. Los paquidermos enfrentarán al Platense de Honduras el 8 de agosto y los emplumados recibirán al Real Estelí de Nicaragua el 2 de agosto.
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