En el norte de Honduras, en las costas del Caribe, se encuentra el destino completo para el turista que busca sol, playas, montañas y deportes extremos. Cayos Cochinos y Utila, para los amantes del mar, y a menos de una hora de distancia el Río Cangrejal para quienes disfrutan las montañas, aguas dulces y vivir al límite con actividades de rafting.
A inicio de marzo, un grupo de periodistas especializados de Honduras, Guatemala y El Salvador recorrieron los tres destinos con el respaldo de la Cámara Nacional de Turismo Capítulo San Pedro Sula, el Instituto Hondureño de Turismo (IHT) y la Policía de Turismo.
Los tres destinos están en promedio a 12 horas de distancia desde San Salvador vía terrestre. El camino directo es saliendo desde la frontera El Poy, en Chalatenango, rumbo a la Gran Central de San Pedro Sula.
Para cruzar hacia Cayos Cochinos hay tres opciones. La primera y más accesible es a través de La Ceiba, una ciudad en el Caribe. En este punto opera Tourist Options, una agencia de viajes de transporte marítimo y buceo de baja profundidad. La hora de salida de las lanchas es entre las 7:00 y 8:00 de la mañana, por lo que la mejor opción es descansar en San Pedro Sula.
San Pedro Sula es la segunda ciudad más grande de Honduras. Se destaca por su variedad de servicios comerciales, hoteleros -entre ellos el Hotel Boutique La Cordillera- y restaurantes como El Manzano, un lugar especializado en carnes y mariscos, cuyo atractivo es cenar bajo un árbol de manzana con más de 50 años de edad.
Cayos Cochinos
Cayos Cochinos está a 45 minutos en lancha desde La Ceiba. Durante el trayecto, según un dicho de la zona, “si la persona se bañó, podrá ver los delfines”, aunque siempre se disfruta del paisaje del mar con tonalidades azules, turquesa y esmeralda, debido a los fragmentos de arrecifes y pasto marino.
Este destino se conforma por 15 islas, 13 de ellas pequeñas y dos grandes, conocidas como Cayo Mayor y Cayo Menor, donde se encuentra el Monumento Natural Marino, una estación científica que investiga y conserva el segundo arrecife más grande del mundo. Éste inicia en la península Yucatán, México, recorre Belice, Guatemala hasta Honduras con hasta 1,000 kilómetros de distancia y alberga 60 diferentes corales.
Dentro del recorrido por Cayos Cochinos se visita Chachahuate, una pequeña isla que alberga a unas 75 familias garífunas, descendientes de África, que se dedican a la pesca y el turismo con un eco albergue, servicios de alimentación y presentación de bailes típicos como “la punta”.
Roman Morales, líder de la comunidad, explicó que el restaurante se construyó hace 14 años con el apoyo del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
En el restaurante trabajan mujeres de 14 familias, quienes por cada platillo vendido destinan 5 % para la compra de gasolina de las lanchas que movilizan a los niños a la escuela en Cayo Mayor, donde la educación básica llega hasta noveno grado.
En Chachahuate no hay energía eléctrica, solo se conectan a una estación dos horas por la noche. “Este es un lugar de naturaleza, de recuperación de pulmones. Somos vigilantes de las coralinas porque nuestros padres fueron los fundadores”, agregó Morales.
Utila
Para cruzar a Utila, saliendo siempre desde La Ceiba, se puede tomar el Utila Dream Ferry. Esta isla es una pequeña ciudad sobre el mar. Se alimenta de su propia central de energía, dispone de cajeros, agencias de deportes extremos, transporte interno y acuáticos a cargo de Roatán Vacations and Tours.
Posee una amplia variedad de alojamiento, como el Hotel Mango Inn, un lugar rodeado de vegetación en medio de calurosas corrientes marinas; así como de bares y restaurantes que ofrecen platillos de mariscos comercializados por los pescadores de la zona.
Utila está rodeada por cayos con población descendiente de británicos y comercio interno.
Jules Cay y Morgan Cay se unen a través de un puente y poseen una empresa de pesca para exportación a Estados Unidos, mientras tanto en Water Cay arriban los turistas para disfrutar de las playas cristalinas y con suerte ver el tiburón ballena.
El oficial Meléndez, destacado en la Policía de Turismo en Utila, descartó que dentro de isla se comentan alteraciones a la seguridad social e indicó que los únicos inconvenientes ocasionados se deben al exceso de bebidas alcohólicas de los mismos residentes del recinto. “El extranjero aquí no da problemas. Viene a divertirse y a sacar sus cursos de buceo”, agregó.
Para el turista que busca relajarse en un ambiente de montaña, a menos de una hora desde las costas, siempre en La Ceiba, se encuentra el Río Cangrejal, un lugar exclusivo para realizar actividades de rafting. Hotel Río es una de las primeras opciones para alojamiento y alimentación, además de contar en sus alrededores con una fábrica de chocolate artesanal.
La Ceiba también posee una variada oferta hotelera y de restaurantes por su punto estratégico para movilizar a turistas a las costas caribeñas, entre ellas la antigua Roatán, Utila y Cayos Cochinos. Uno de los principales lugares para reposar es el Hotel Quinta Real, que posee acceso directo al mar y piscinas dentro de las instalaciones.
Si el turista desea disfrutar de mariscos, el restaurante Kabasa, en Sambo Creek, posee un variado menú de platillos elaborados con camarones, crustáceos, pescado y las tradicionales tajadas. Para quienes prefieren las carnes, Guapo’s Bar and Grill, en La Ceiba, es una de las mejores opciones.