El concepto y práctica de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) debe reinventarse e incluir a grupos excluidos de la sociedad civil, como organizaciones ecológicas y las que defienden los derechos de las personas indígenas y la comunidad LGBT (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales), aseguró ayer Víctor Martín, consultor de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Martín es una facilitador del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), investigador y experto en negociación y soluciones de conflictos. Esta semana visitó El Salvador a solicitud de la Cámara Americana de Comercio (AmCham) para que impartiera una conferencia sobre la RES como rol transformador de las empresas en las personas y en el entorno.
El experto propone crear una entidad conformada por empresas, gobierno, universidades y sociedad civil , que se denominaría EGUS, y la cual ya se implementa en países como México o Argentina. Este grupo de actores reuniría el trabajo aislado que se realiza entorno a la RSE, optimizaría los recursos tecnológicos y humanos.
La propuesta es incluir a los gobiernos locales por su cercanía con la población, a las universidades para repensar y medir los impactos de la RSE y la sociedad para aportar proyectos y ejecutar acciones.
La sociedad tendría que ser representada, detalló, por grupos que defienden al medio ambiente, la población indígena, la comunidad LGBT y contra la discriminación racial.
Martín, consciente de que este concepto de RSE no logrará implementarse de inmediato, aseguró que “todos estos grupos y todas estas áreas son de responsabilidad social, que contribuyen a una vida un poco menos desigual, menos excluyente y más equitativa”, manifestó.
Aunque por el momento el experto solo ha conocido el trabajo de las empresas representadas en AmCham, aseguró tener una perspectiva positiva de El Salvador, pero, como el resto de países, puede crecer en asociarse a nivel nacional, internacional e incorporar otros actores.
Martín adelantó la Unesco apoyará a las empresas de AmCham en capacitaciones y modelos de RSE, pues “lo importante en la responsabilidad social es que se haga con convicción, que los actores estén convencidos de que eso es valioso y que tiene efectos sobre la sociedad, ambiente, personas”, agregó.