“No es que quieran ser emprendedores, sino que no tienen esas oportunidades. Yo diría que la mitad de los emprendedores es porque no encuentran un trabajo y la mitad sí declara que lo hace porque quiere crecer”, agregó el también catedrático de la ESEN.
Masferrer indicó que aún no se da seguimiento a los emprendedores para medir la media de vida de las iniciativas, pero según la última edición del GEM, en El Salvador el 14 % de la población tiene un negocio con menos de tres años de existencia, mientras que el11.5 % reporta uno de más de tres años.
“En El Salvador alrededor del 60 a 70 % de los negocios probablemente mueren en los primeros tres años, y el otro 30 % tiene como una perspectiva de sobrevivencia bastante larga”, añadió. Esto se debería a que la mayoría se incorporan en modelos tradicionales.
Los emprendedores podrían apostarles a nichos como desarrollo de nuevas tecnologías, industria de servicios a empresas a distancia o los agronegocios, indicó Masferrer.
Mientras tanto, Fiorina Mugione, jefa del Departamento de Emprendimiento de la UNCTAD, propuso impulsar el sector marítimo en El Salvador, así como el comercio electrónico.