La Mesa Nacional de Transporte amenazó con un incremento al pasaje del transporte público para el 2018, por la falta de acuerdo entre legisladores para prorrogar el decreto que otorga el pago del subsidio a los empresarios.
Los representantes advirtieron que, de no conseguir la aprobación por parte de las fracciones de los partidos políticos, las tarifas del pasaje podrían incrementar a partir de enero.
“En enero se nos obliga a solicitar al Gobierno de la República un ajuste tarifario no político, sino que técnico. Esto quiere decir que la tarifa de $0.20, sin el subsidio, no compensa los costos operativos de las más de 11 mil unidades de transporte”, dijo William Cáceres, empresario de transporte.
El Gobierno otorga mensualmente a los empresarios del transporte colectivo una compensación de $200 por microbús y $400 por bus a los propietarios de estos; sin embargo, los mismos manifiestan que los costos operativos son más altos y la población cancela la misma cantidad por el servicio de transporte, que no ha incrementado en los últimos años.
Por esta razón, Miguel Castañeda pidió una solución. De lo contrario, anunció repercusiones para el bolsillo de los salvadoreños. “En los primeros días de enero habrían consecuencias que afectarían a la población”, dijo.
La mesa de transportistas, donde están aglutinados empresarios de todo el país, realizará “estudios de costos” para después solicitar “una tarifa real que permita la sostenibilidad”, aseguraron.
En El Salvador existen más de 11 mil unidades de transporte colectivo y, según los empresarios, 2.9 millones de salvadoreños hacen uso de su servicio público a diario.
Aunque dijeron que no pretenden afectar a los usuarios, el aumento de pasaje golpearía a más del 83 % de los salvadoreños que utilizan los buses y microbuses.