Quintanilla Méndez está en prisión desde abril. / J.L.


A 10 años de cárcel fue condenada Joselyn Andrea Quintanilla Méndez, por el homicidio de su hija, a quien apuñaló tras nacer, según la acusación que la Fiscalía expuso en el juicio ayer.

La autopsia determinó que tenía entre ocho y diez horas de nacida y que la causa de la muerte fue por lesiones con arma blanca que recibió; en las investigaciones, la Fiscalía asegura que fue su madre quien cometió el hecho.

Éste ocurrió el 10 de abril del 2018 en la residencial Las Palmeras, del municipio de Cuscatancingo y dos vecinas de la imputada que rindieron su testimonio en la vista pública dijeron que observaron salir bastante sangre por la cuneta.

Una de las vecinas dice que le preguntó en dos ocasiones si necesitaba o le pasaba algo, pero respondió que no; a la tercera vez que llegó la vecina, le dijo que sí y cuando entró a la habitación vio la cama llena de sangre y además Quintanilla Méndez se desmayó.

Al despertar le preguntaron si la llevaban al hospital donde trabajaban sus padres, ya que la mamá es enfermera y su padre médico, pero ella pidió que la llevaran a otro centro de asistencia; la terminaron trasladando al hospital Molina Martínez, de Soyapango.

Luego llamaron a la mamá de la imputada y ésta descubrió que en el closet de Quintanilla Méndez, estaba una bolsa negra y la puso en el lavadero, seguidamente llamó a la Policía, y después llegaron la Fiscalía y Medicina Legal.

Al momento de hacer la inspección el forense en la bolsa, encontró a la bebé y determinó que la recién nacida tenía 16 puñaladas en el tórax, abdomen y en el cuello; con todo lo encontrado se ordenó la captura de la imputada, quien ayer fue condenada por el Tribunal Quinto de Sentencia de San Salvador.

Una testigo dijo que cuando la imputada llegó al hospital presentaba sangramiento en el cuello de la matriz, pero estable y no había alteración emocional.