El colaborador de la pandilla, apodado “La Bella”, está desaparecido. / DEM


A purgar penas de ocho y 89 años fueron condenados tres cabecillas de la Mara Salvatrucha, procesados en el caso conocido como “La Bella y La Vaca”, mientras que dos empresarios y el cabecilla de la ranfla histórica, Saúl Antonio Turcios Ángel, alias “El Trece”, fueron absueltos por lavado de dinero.

La Fiscalía denominó el caso como “La Bella y La Vaca”, en alusión a Mauricio Armando Sánchez, conocido como “La Bella”, un colaborador de la pandilla, a quien supuestamente asesinaron y desaparecieron, luego que con dinero de la estructura comprara una casa en Condado Santa Rosa por un monto de $228 mil.

“La Vaca”, es el alias de Luis Abraham Solórzano Alas, uno de los cabecillas de la MS de Santa Tecla, quien recibió una condena de tres años por agrupaciones y cinco por lavado de dinero.

Según la Fiscalía, Solórzano Alas pasó de ser motorista a empresario de la ruta de buses 97 que hace recorrido de la comunidad San José El Pino hacia el centro de Santa Tecla; esa populosa comunidad fue por años el centro de operaciones de Arístides Umanzor, alias “El Sirra” y “El Trece”, este último fue absuelto por lavado de dinero y agrupaciones ilícitas porque no se pudo probar su participación en los hechos.

El juez dijo que el testigo nunca lo mencionó y jamás se pudo comprobar que el dinero que lavaron era de su propiedad.

El Juzgado Especializado de Sentencia “C” también condenó ayer a los cabecillas Carlos García Chávez e Isaac Serpas García, alias “El Sangriento”, a 89 años de cárcel por agrupaciones ilícitas, un caso de proposición y conspiración en el delito de homicidio agravado y dos casos de homicidio agravado.

Mediante intervención telefónica, a Serpas lo escuchan hablando con “La Vaca” respecto a dinero de las extorsiones y venta de droga que la pandilla le iba a entregar y con el cual supuestamente compró la casa en el Condado Santa Rosa, pero utilizaron como testaferro a “La Bella” quien pagó ese inmueble con $118 mil en efectivo y $100 mil en cheques de caja en plazo de diez días.

En las pesquisas se determinó que Sánchez Torres, supuestamente con el dinero de la pandilla, adquirió en el año 2015, otra casa valorada en $130 mil, dos vehículos nuevos y otros usados por un monto de $41 mil. También un apartamento en $18 mil y tenía cuatro ventas de medicinas en el mercado de Santa Tecla.